la anorexia
Maltratado en la niñez, 'Pescadito' pasó de ser un joven lleno de rabia a un criminal.
Pasó por la esquina donde su amiga tenía un puesto de frutas callejero y le dijo:
–Voy a matar a su marido.
Andrés tenía 11 años y la rabia adentro: un día antes, el hombre, también vendedor de fruta, le había quitado su celular. Sin motivo, por molestarlo, y no se lohabía devuelto. Andrés siguió su camino sin oír a su amiga, que le respondió:
–Con mi marido no se meta, peladito.
Lo siguiente que hizo fue entrar al almacén de remate que quedaba al frente y comprar un cuchillo. Salió, buscó al vendedor y le clavó el arma por detrás, en la mitad de la espalda. Intentó darle una segunda puñalada, pero el hombre corrió y se metió debajo de un carro parqueado. Eso losalvó, aunque pasó varios días hospitalizado y perdió parte del hígado.
Esta fue la primera vez que los habitantes del barrio Britalia, en el suroccidente bogotano, vieron a Andrés Leonardo Achipiz Bolívar con un arma en la mano.
Ahora él es más conocido por su alias: ‘Pescadito’, está preso en la cárcel de La Picota y, según ha dicho, les ha quitado la vida a por lo menos treinta personas,“de las que tenga conciencia”. Cumple 19 años el próximo 5 de julio.
Andrés llegó al barrio Britalia cuando tenía cuatro años. Sus papás viajaron del Huila a Bogotá en busca, como tantos, de mejores opciones económicas. Ella, Marleny, se empleó en restaurantes del sector. Él, José, montó un puesto callejero en una carreta de madera y vendía fruta, verdura y pescado, cuando lo conseguía a buen precioen Corabastos.
Andrés, el segundo de seis hijos, cursó hasta sexto grado en el colegio Gran Britalia, adonde va la mayoría de niños del sector. Abandonó las clases para ayudar a su papá en la venta callejera.
Durante varios años, la familia Achipiz –papá, mamá, seis hijos– vivió en un apartamento alquilado en Britalia o, mejor, en una habitación de no más de siete por tres metros, compartiendocamas para caber. Ahí mismo preparaban el salpicón que vendían en la calle.
El dueño de la casa los recuerda, sobre todo a José Achipiz, el papá, al que describe como “un animal salvaje”. La gente de la cuadra donde Andrés trabajaba todavía recuerda la tarde en que José amarró a su hijo de 10 años con una cuerda y lo arrastró por la calle. Ese día no había conseguido el dinero que le exigía. Ynadie se atrevió a detenerlo.
A los 15 años, ‘Pescadito’ fue detenido por homicidio y llevado al centro El Redentor, como menor de edad. No alcanzó a terminar la pena porque se escapó en medio de una revuelta, según investigadores de la Dijín.
Para entonces, Andrés ya tenía un hijo. La mamá era una jovencita del barrio, drogadicta. “Él la tenía como una reina. Le compraba de todo –dice una amiga–.Pero vendía todo para conseguir droga.” Andrés le quitó el niño y se lo dio a sus papás para que lo cuidaran. Hoy vive con ellos, en Huila, a donde se fueron con la idea de alejarse de posibles represalias de enemigos de ‘Pescadito’.
Tras salir de El Redentor, en el barrio sabían que Andrés se había ido a vivir con Jenny, unos diez años mayor que él y con seis hijos. Ese noviazgo duró poco porqueAndrés comenzó una relación con la hija mayor de Jenny, Lady Tatiana, de 13 años. “Yo sé que con él mi hija no va a pasar hambre”, les decía Jenny a sus amigas, aunque también lloraba y no lograba aceptar la situación.
En febrero pasado, Jenny fue asesinada. Le dispararon en la cabeza cuando iba por la calle. Unos dicen que fue ‘Pescadito’. Otros se niegan a creerlo porque, incluso, él fue a sufuneral de la mano de Lady Tatiana. Este es uno de los casos que las autoridades le investigan.
“Lady es el tesoro de Andrés. Ella estaba logrando que él cambiara”, dice la mujer que lo ayudaba a subirse en las canastas cuando niño. Por Lady, dicen, se fue de Britalia a vivir a Bosa. También consiguió un trabajo como asistente de obra en una construcción de Suba. Allá vivía y a eso estaba...
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