La aventura de ser maestro

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La aventura de ser maestro

José M. Esteve
Universidad de Málaga
Lectura enriquecida
Por Francisco Martínez Guerra
Estar en clase es un privilegio que segana cuando conseguimos comunicar lo que exactamente queremos decir, logramos la empatía con empatía con nuestros alumnos y les ayudamos a descubrir el sentido de aprender.
Después de haberrealizado el andamio cognitivo “La aventura de ser maestro” y cotejado las respuestas de los compañeros en relación a las preocupaciones y problemas; satisfacciones y maneras de enfrentar las dificultades,así como los aspectos de planeación, acción y evaluación de las actividades docentes, concluyo que a todos nos faltaron elementos en el aspecto metodológico. Sabemos que nos gusta nuestro trabajo, perono tenemos claros los aspectos procedimentales.
Sin embargo, después de haber leído a Esteve me queda la convicción de que al menos, en línea generales, estamos haciendo lo correcto, que todosempezamos en esto como un ensayo y afinando sobre la marcha. En efecto, se trata de una aventura emocionante, llena de satisfacciones, pero con una gran dosis de tensión, que aumenta o disminuye en la medidade nuestro dominio del programa y la metodología para aplicarlo.
Se aprende en el camino, parafraseando a Antoni Machado, y nos viene la convicción de ser útiles a la sociedad, aunque no siempre sevalore nuestro trabajo.
Enlazar pensamiento y sentimiento. Así como Esteve retoma la definición de Unamuno, yo también me identifico en el sentido de ser maestro es “dedicar la propia vida a pensary sentir, y a hacer pensar y sentir; ambas cosas juntas”.
Entonces, desde esta perspectiva, la escuela se convierte en un lugar para compartir aprendizajes, tiempo, espacio y el afecto con losdemás. Donde la sorpresa, la emoción y algún secreto por descubrir, siempre están a la espera. Es el espacio ideal para las sinergias y la expansión del intelecto. Donde todos aprendemos de todos....