La Baja Edad Media

LA BAJA EDAD MEDIA.- LA CRISIS DE LOS SIGLOS XIV Y XV.

La sociedad medieval de la Península Ibérica vivió una profunda crisis demográfica, económica y social durante los siglos XIV y XV de la que emergió una sociedad más urbana y humanista. Castilla experimentó un crecimiento demográfico importante, un extraordinario desarrollo comercial y ganadero, con proyección en el Atlántico, y unaprogresiva centralización de sus instituciones políticas. Nacieron, así mismo, una nobleza y una burguesía formadas por expertos en leyes al servicio del monarca; este, por su parte, gozó de una gran independencia frente a las Cortes. La influencia social de las oligarquías urbanas y de los grandes señoríos también aumentó. En Aragón y Navarra, la crisis demográfica y económica fue más profunda,especialmente en Cataluña, la principal impulsora de la expansión comercial por el Mediterráneo. Los reyes no consiguieron someter a los grupos sociales poderosos y, en el caso de la Corona de Aragón, ni siquiera lograron unificar las instituciones. Sin embrago, los monarcas aragoneses se lanzaron a aventuradas conquistas exteriores en el Mediterráneo, lo que los obligó a pactar con las Cortes y adepender económicamente de ellas.

ORGANIZACIÓN POLÍTICA E INSTITUCIONES DE GOBIERNO.
Los cambios acaecidos durante la Baja Edad Media tuvieron repercusiones importantes en las instituciones políticas de los reinos peninsulares. La mayoría de los grupos sociales presionaban a los reyes para mantener o aumentar su cuota de poder; los monarcas, por su parte, tuvieron que actuar en consecuencia yadaptar las instituciones para consolidar el Estado (encarnado en ellos mismos y en su dinastía) como un árbitro entre la nobleza, el clero y los plebeyos.

Esta pugna entre los grupos sociales y la corona caracterizó la política de la época. De ella saldría fortalecida la figura del monarca, sobre todo en Castilla. En la corona de Aragón, sin embargo, el rey encontró mucha más oposición para afianzarsu poder.

LA CONFIGURACIÓN DE LA MONARQUÍA MEDIEVAL.- Hasta el siglo XIII, en los reinos cristianos de la península el monarca había sido un jefe guerrero. Aunque estaba rodeado de cierto carisma religioso, lo cierto es que era un noble más que tenía como objetivo vencer al enemigo en el campo de batalla y vivir “de los suyo”.

Su circulo más cercano (llamado corte, curia regia o consejoprivado) constituía el gobierno supremo del reino, que solía estar formado por miembros de su familia y una serie de oficiales palatinos. Junto a ellos se encontraban personas sin un cargo específico, generalmente abades, obispos y magnates (personas ilustres), que actuaban como consejeros y asesores del monarca a la hora de tomar decisiones, dictar leyes e impartir justicia, aunque la última palabrasiempre la tenía el rey.

La corte estaba rodeada por un pequeño grupo de sirvientes, mercaderes, artesanos, e incluso, delincuentes y pedigüeños. Ni el rey ni su corte tenían una residencia fija, sino que eran ambulantes.

El rey estaba asistido, además por funcionarios; el principal era el merino (llamado así en la mayor parte de la península) o battlle o veguer (en Cataluña, Baleares yValencia). Cada uno de estos funcionarios tenía a su cargo un área territorial; en ella administraba las posesiones del rey (realengos), procuraba que se recaudasen las rentas e impuestos y reclutaba tropas. Generalmente, este funcionario impartía justicia en nombre del monarca.

Por encima de ellos, a partir del siglo XII, figuraban un merino mayor o Batlle general.

Fuera de la jurisdicciónreal, existían grandes extensiones de tierra en la que ni merinos ni batlles podían intervenir: los señoríos laicos y eclesiásticos (solariegos y abadengos, donde los propios señores desempeñaban las funciones del rey.

La actuación del monarca también estaba muy limitada en numerosas ciudades y villas que contaban con cierta autonomía interna. Estas ciudades disponían de concejos, normalmente...