la busqueda de la verdad en la muerte y la brujula

La obsesión por el saber absoluto en “La muerte y la brújula”

El momento en el cual el investigador se convierte en la última víctima de una serie de crímenes que ya parecía concluir es ahí cuando Jorge Luis Borges en “La Muerte y La Brújula” introduce el tópico de como la vocación y la obsesión por el saber llevan a su protagonista ―que pasa de investigador racional a víctima― a una muertesegura y planeada sorpresiva pero cautelosamente por su victimario, un viejo conocido que juró cobrar venganza.
En el desarrollo de Borges se desencadena una serie de eventos que terminan con la muerte de su personaje principal, Erik Lönrott. El lector es sumergido en la lectura gracias a que no se narra cómo los crímenes son cometidos, sino que simplemente los crímenes sucede. El enigma, tantopara el investigador Lönrott como para el lector, queda intacto hasta el final del cuento. Y es ese mismo enigma el que condena a muerte al protagonista. La necesidad de descubrir la verdad lleva a este impecable investigador y amante de la razón al borde de la desesperación por encontrar a la mente detrás de los crímenes. Poco se sabe de la seguidilla de asesinatos, la cual cumple con unaregularidad extrema. Es esa regularidad extrema la que hace pensar que todos los movimientos y tácticas de Lönrott son acertados. La precisión del asesino no deja dormir al investigador, y es así como, pese a los reiterados intentos de encontrar la verdad, el flamante investigador, es engañado por Scharlach pero no desde el principio de la sucesión de crímenes, si no gracias a que se hizo vagamentepública la línea de investigación que Lönnrot llevaba respecto al primer crimen. Es así como su enemigo de un par de años aprovecha la situación y decide seguir despistando ―o dando sólidas pistas, según el punto de vista de Scharlach― para terminar de cobrar su venganza.
Erik Lönnrot es presentado como la parte racional de la investigación. Es perseverante y asegura que todo crimen es interesante, quelas cosas no pasan porque sí, sino que hay algo más que un simple hecho. Cree firmemente que para descubrir la verdad hay que seguir un camino de razonamiento. Es ésta misma racionalidad la que lo lleva a caer en una simple trampa de Scharlach al no aceptar la simplicidad de las cosas, ya que si hubiera seguido la línea de Treviranus no hubiera acabado muerto. En segundo lugar, es también ladesesperación de no poder resolver el misterio en tiempo y forma de estos tres crímenes que lo lleva a caer en pistas en las cuales no hubiera caído si hubiera estado plenamente sobrio y no lleno de preguntas relacionadas a la serie de crímenes. Lönnrot, al ser un hombre tan precavido, no confiaría en llamadas ni cartas anónimas que lo ayuden a develar el misterio. Claramente trataría de resolverlosólo con la ayuda de su razón. Tal fue la desesperación que el investigador tenía, teniendo en cuenta los cien días de investigación con resultados nulos, que no tuvo más remedio que dar por verdaderas tales pistas brindadas. Y por último, destaco la soledad con la que murió Lönnrot. Un hombre que le había dedicado mucho tiempo a un caso ― el cual lo lleva a la muerte― pasa los últimos momentos de suvida escuchando a su asesino remarcar todos los malos pasos que tomó y las evidentes pistas que no vio.
En las primeras palabras de Lönnrot en el cuento ya se puede abismar cuanto él confiaba en su razón plena; “Posible, pero no interesante ― respondió Lönnrot―. Usted replicará que la realidad no tiene la menor obligación de ser interesante. Yo le replicaré que la realidad puede prescindir deesa obligación, pero no las hipótesis. […]”. Más adelante en el cuento, se encuentra esta frase que relata como Lönnrot se sintió cuando, gracias a la carta, todo parecía cobrar sentido: “Lönnrot las estudió. Los tres lugares, en efecto, eran equidistantes. Simetría en el tiempo; simetría en el espacio también… Sintió, de pronto que estaba por descifrar el misterio […]”. Desde mi punto de vista,...