la caca

Guatemala 7 de noviembre del 2010
Queridos Nancy y Junior:
Nunca imaginé que llegaría el día en que pudiera abrir mi corazón ante ustedes. Todavía tengo tan presente cuando los tres jugábamos en la casa de mama Chitía o en la casita en la Colonia El Rodeo hace unos cuantos añitos. Recuerdo con tanto amor cuando los llevaba a volar barrilete o a refaccionar o a jugar basketball a la zona 15.HOY Ha llegado el momento de que les confiese cómo me sentí la mañana en la cual mi mama me comentó que mi hermano René se casaba. Yo era una pequeña de 9 años y la noticia me cayó como agua fría. Sentía que algo filoso entraba a mi corazón, ya que mi hermano René era mi mundo. Era mi defensor, mi maestro, mi héroe. Lloré incansablemente por varios días. Mi madre me consolaba y me decía quetodo ser humano llega a ese punto que quiere casarse. Me comentó que pronto iba a venir un bebe a alegrar el hogar. Esta noticia me relajó ya que soñaba con cargar un hijo de mi hermano mayor. Y así fue, cuando llegó Nancy a mi vida, yo era la niña de 10 años más feliz, tenía una sobrinita con la cual yo podía jugar y tener un pedacito de mi hermano mayor en mis manos.
La ventaja de cuando unoes niño es que a los adultos se les olvida que estamos presentes, y hacen todo tipo de comentarios. Una vez no se me olvida que mi hermano René pasó a la casa de sus abuelitos y yo me quería ir con él a su casa, para jugar con Nancy. El muy emocionado me dijo que sí. Cuando llegamos a su casa, Marisol me recibió un poco sorprendida, y me invitó a pasar. Inmediatamente yo busqué besar y abrazar ami pequeña sobrina quien estaba en su corralito. Solo escuché que se cerró la puerta bruscamente y empezó una serie de reclamos y discusiones relacionadas con el por qué me había llevado René a su casa. La discusión se hizo mayor cuando se enteró Marisol que había que irme a dejar. En esos momentos entendí que realmente yo no le era muy de su agrado. El hecho de irme a dejar únicamente implicababajar sólo siete cuadras por la Calzada Mateo Flores.
Ya en la noche, les comenté a mis padres la situación que había pasado en la casa de mi hermano. Mis padres me dieron unos buenos consejos, no hay que estar escuchando pláticas de esposos y que mejor era evitar ir a la casa si no había previa invitación, mi mamá decía “ellos son recién casados, y necesitan su espacio”.
Aunque bastantetriste, me propuse obedecer y aceptar el hecho de que las cosas ya no podían ser iguales. Como todo ayuda a bien, el hecho de ya no tener a mi hermano mayor en casa me hizo ir apreciando más y más a mi hermano Gustavo y compartir con él.
Lamentablemente la poca aceptación de su mamá hacia mí se iba haciendo más latente, y los comentarios de desaprobación ya no se quedaban a nivel de familia, sinoque se propagaron en varios lugares. Me enteré de cuánto le molestó que llegara a integrarme al coro Cantares, que asistiera al club Ichtus, y que más tarde fuese maestra de primarios. Me dolían tanto los comentarios desagradables que decía de mi familia y de mi persona también. Honestamente les digo, siempre los pasé por alto. Lo que menos quería yo era perder el amor de mi hermano (que yase había distanciado y enfriado por circunstancias obvias), pero ahora no quería yo perder a mis sobrinos. Es por eso que SIEMPRE hice caso omiso a chismes y comentarios. Opté por no hacerles caso.
Ustedes se preguntarán ¿por qué traigo a colación todo esto? En Primer lugar, es para que se den cuenta de que mi hermano René ocupó por mucho tiempo un lugar muy especial en mi corazón. Lo quiero ysiempre lo querré. En Segundo lugar, para que ustedes se den cuenta de lo mucho que los quiero y recordarles de que hemos vivido tiempos inolvidables, cuando éramos todos pequeños.
Ahora que son adultos jóvenes, quiero que se den cuenta que, si bien no tenemos una relación estrecha entre su padre y yo, es por evitarle tensiones en su matrimonio. Entiendo que una relación entre hermanos es...