LA CAMISA DEL HOMBRE FELIZ
Páginas: 2 (410 palabras)
Publicado: 13 de junio de 2015
LA CAMISA DEL HOMBRE FELIZ
En las lejanas tierras del norte, hace mucho tiempo, vivió un Rey que enfermó gravemente. Reunió a los mejores médicos de todo el imperio, que le aplicaron todos losremedios que conocían y otros nuevos que inventaron sobre la marcha, pero lejos de mejorar, el estado del Rey parecía cada vez peor. Le hicieron tomar baños calientes y fríos, ingirió jarabes deeucalipto, menta y plantas exóticas traídas en caravanas de lejanos países.
Le aplicaron ungüentos y bálsamos con los ingredientes más insólitos, pero la salud del Rey no mejoraba. Tan desesperado estaba elhombre que prometió la mitad de lo que poseía a quien fuera capaz de curarlo.
El anuncio se propagó rápidamente, pues las pertenencias del gobernante eran muchas, y llegaron médicos, magos y curanderosde todas partes para intentar devolver la salud al Rey. Sin embargo fue un poeta quien pronunció:
-Yo sé el remedio: la única medicina para su mal, Señor. Sólo hay que buscar a un hombre feliz:vestir su camisa es la cura a su enfermedad.
Partieron mensajeros del Rey recorriendo la Tierra, pero encontrar a u hombre feliz no era tarea fácil: aquel que tenía salud le faltaba dinero, quien loposeía, carecía de amor, y quien lo tenía se quejaba de los hijos.
Una tarde, los soldados del Rey pasaron junto a una pequeña choza en la que un hombre descansaba sentado junto al fuego de una chimenea:-¡Qué bella es la vida! Con el trabajo realizado, una salud de hierro y afectuosos amigos y familiares, ¿qué más podría pedir?
Al enterarse en el palacio de que, por fin, habían encontrado un hombrefeliz, se extendió la alegría. El hijo mayor del Rey ordenó inmediatamente:
-Tráeme prestada la camisa de ese hombre. ¡Ofrécele a cambio lo que pida!
En medio de un gran alboroto, comenzaron lospreparativos para celebrar la inmediata recuperación del gobernante.
Grande era la impaciencia de la gente por ver volver a los mensajeros del Rey con la camisa que curaría a su gobernante, más, cuando...
En las lejanas tierras del norte, hace mucho tiempo, vivió un Rey que enfermó gravemente. Reunió a los mejores médicos de todo el imperio, que le aplicaron todos losremedios que conocían y otros nuevos que inventaron sobre la marcha, pero lejos de mejorar, el estado del Rey parecía cada vez peor. Le hicieron tomar baños calientes y fríos, ingirió jarabes deeucalipto, menta y plantas exóticas traídas en caravanas de lejanos países.
Le aplicaron ungüentos y bálsamos con los ingredientes más insólitos, pero la salud del Rey no mejoraba. Tan desesperado estaba elhombre que prometió la mitad de lo que poseía a quien fuera capaz de curarlo.
El anuncio se propagó rápidamente, pues las pertenencias del gobernante eran muchas, y llegaron médicos, magos y curanderosde todas partes para intentar devolver la salud al Rey. Sin embargo fue un poeta quien pronunció:
-Yo sé el remedio: la única medicina para su mal, Señor. Sólo hay que buscar a un hombre feliz:vestir su camisa es la cura a su enfermedad.
Partieron mensajeros del Rey recorriendo la Tierra, pero encontrar a u hombre feliz no era tarea fácil: aquel que tenía salud le faltaba dinero, quien loposeía, carecía de amor, y quien lo tenía se quejaba de los hijos.
Una tarde, los soldados del Rey pasaron junto a una pequeña choza en la que un hombre descansaba sentado junto al fuego de una chimenea:-¡Qué bella es la vida! Con el trabajo realizado, una salud de hierro y afectuosos amigos y familiares, ¿qué más podría pedir?
Al enterarse en el palacio de que, por fin, habían encontrado un hombrefeliz, se extendió la alegría. El hijo mayor del Rey ordenó inmediatamente:
-Tráeme prestada la camisa de ese hombre. ¡Ofrécele a cambio lo que pida!
En medio de un gran alboroto, comenzaron lospreparativos para celebrar la inmediata recuperación del gobernante.
Grande era la impaciencia de la gente por ver volver a los mensajeros del Rey con la camisa que curaría a su gobernante, más, cuando...
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