la carencia de un significante de la feminidad
y del goce femenino
Virginia Poo Gaxiola*
A Alejandra Trejo Poo
HABLAR SOBRE LA sexualidad femenina desde el punto de vista psicoanalítico no es una empresa fácil. Ya Freud se refería a ella como "el
enigma", "el continente negro", la cual dejaba muchas interrogantes a
las que la investigación teórica y clínica psicoanalíticas no daban
respuestas ni definitivas,ni uniformes.
Este trabajo no tiene la pretensión de dar la luminosidad ni última,
ni por supuesto única, que requiere tal "continente negro". El propósito
es más mesurado: el de contribuir al debate de aquello que tal vez está
en el telón de fondo de lo que en gran parte nos interrogamos los
psicoanalistas: por la sexualidad y el goce femenino.
Como es bien sabido, Freud fue infatigabledesde sus primeros
hasta sus últimos escritos, en la investigación teórica y clínica sobre
la vida sexual en general, y en particular sobre la vida sexual de las
mujeres, campo donde inauguró su investigación clínica y donde
siempre quedó insatisfecho. Para Freud había algo que no andaba en
el terreno de la sexualidad en general, pero había algo más particular
en la sexualidad femenina que nopodía asir, algo de ella que siempre
se le escapaba.
* Este trabajo fue presentado en el curso de Psicología de la mujer en el Hospital
General de México, SS, con el tema "La mujer y la violencia". La autora es
profesora del Departamento de Producción Económica de la UAM-Xochimilco
y psicoanalista de la Fundación Mexicana de Psicoanálisis, IAP
TRAMAS 14-15 • UAM-X • MÉXICO • 1999 • PP.145-168
145
TRAMAS.
SUBJETIVIDAD
Y
PROCESOS
SOCIALES
Es hasta 1925, en su escrito sobre "Algunas consecuencias psíquicas
de la diferencia anatómica entre los sexos"1 que sintetiza su primera
formulación más acabada sobre la sexualidad femenina, reformulación que no mucho después es sometida a reflexión y a cuestionamiento en un trabajo de 1931 que lleva por título "Sobre lasexualidad
femenina", donde pone al descubierto una diferencia fundamental
en el campo de lo psíquico, entre aquello que definiría la diferencia
entre los sexos: por un lado, la estructura del complejo de Edipo y del
complejo de castración en la mujer; y por el otro, su ulterior diferencia
en la construcción del superyó y el masoquismo femenino.
La nueva tesis de Freud en 1925 se refería a quela diferencia entre
el desarrollo sexual de la niña y del niño residía en que la primera
tendría que realizar un doble cambio para arribar a una posición
femenina: el cambio de órgano sexual rector —clítoris por vagina—, y
el cambio de objeto de amor -la madre por el padre.
Sin embargo, en un trabajo dos años antes, en 1923, en "La
organización genital infantil" Freud sostiene ur.a tesis quenunca
abandonaría, sino que se agregaría a sus nuevas formulaciones, y es la
que se refiere a decir que:
...para ambos sexos, sólo desempeña un papel un genital. El masculino. Por tanto, no hay primado genital, sino un primado del falo.
A esta tesis, que más adelante problematizaré, se le agrega una
nueva en el trabajo "Sobre la sexualidad femenina" de 1931, y es
aquélla que hace hincapié enla fase de ligazón preedípica de la niña
con su madre, resaltando el elemento "activo" en la feminidad en
general.
1 Sigmund Freud, "Algunas consecuencias psíquicas de la diferencia anatómica
entre los sexos" (1925), en Obras completas, t. XIX, Bs. As., Amorrortu, 1976.
2 Sigmund Freud, "Sobre la sexualidad femenina" (1931), idem., t. XXI.
3 Sigmund Freud,"La organización genitalinfantil" (1923), idem., t. XIX.
4 Ibid., p. 146 (cursivas del autor).
146
T
E
M
Á
T
I
C
A
Para problematizar estas tesis, en este trabajo dividiré mi exposición
en tres partes: la primera se referirá a la diferencia fundamental entre
la niña y el varón, con relación al complejo de Edipo y de castración; la
segunda, corresponderá a la diferencia entre aquellos sujetos...
Regístrate para leer el documento completo.