La celestina
CALISTO: -Me pregunto chica bella, radiante como esta rosa, si eres mujer o eres diosa
MELIBEA: -Insolente ( Lo mira con desprecio y no tomala rosa)
Calisto se va muy triste a hablar con su ama de llaves Lucrecia
CALISTO: - ¡Lucrecia! ¡Lucrecia! ¿En donde estas?
Lucrecia entra en escena muy agitadaLUCRECIA: - Aquí estoy señor haciendo mis labores
CALISTO: Cierra la ventana mis pensamientos tristes no son dignos de luz ….
LUCRECIA: - Oh señor ¿por que dice eso?(sorprendida)CALISTO: - Quede flechado por la mujer mas bella que he visto en el planeta. (inspirado)
LUCRECIA: -Señor yo se que hoy me he arreglado pero no es para tanto
CALISTO:- Notonta pero no me he enamorado de ti, sino mas bien de la hermosa Melibea
LUCRECIA: - Ah pues por ahí hubiera empezado
CALISTO: - ¡Eso no importa! Lo importante es que miamada de mi no se ha enamorado
LUCRECIA:- Amo no se preocupe conozco el fin de su tristeza….
CALISTO:- ¡Pues dimelo ahora! (casi gritando)
LUCRECIA: - Lo puede ayudarCelestina, hechicera, astuta, audaz en cuantas maldades hay.
CALISTO: -¿Cuándo puedo hablar con ella?
LUCRECIA:-Yo la traeré yo le contare tu pena y ella te dará el remedio.CALISTO:-Pero no tardes…
La sirvienta sale de la casa y va en camino a la de Celestina. Llegando al hogar de la hechicera toca la puerta y esta le habré.
CELESTINA: (abrela puerta) –Lucrecia ¿Qué te trae por aca?
LUCRECIA: -Calisto arde de amor por Melibea. De ti y de mí tiene necesidad.
CELESTINA: -Ya veo pues pensare que puedo hacer
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