La ciudad-estado
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ueña.
Iaaos de ejercicio de los entraría a Is r e e M n ; t ciudadanos int& m
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del COIIW¡-W& ea &&S el ~a b , g w tribunales m sus &r¡des jmdos Ipulans.BI moQ de c*sc16. de coupol pbamm ra fines de gobfemo que poda dceitsc que zcpmentaban a todo el pueblo.*dgntido.n=l hhs, local, los atenieases se dividan en unos cien demos, a @riamos parroquias odistritos. Estos d q o s eran las unidada del g o b h local. Pero en un a p t o no eran estrictameate mmparabla a las unidada del gobierno loFal; la pertenencia a ellos era hereditaria, y aunque unateniense se. trashhe de ana localidad a otra, seguía siendo miembro del mismo demos. En consecaencia, aun rie el danos era una loailidd, el sistema no era puramente de repmentadn un cierto p d o de m h nd lar1 y eidas s n sinembulo, lm dunm i obly~mip polid. de importancia bastante csera arreglo a Ina c o n q i o n e s moderna, son chrnmte de mhinlorn ejecutiva^'^ legislativa y no judicial. LoJmiembms de ao hibnnala. o jurados, einn nombrada por los ts dorigahdose una üv$ de &S mí1 ei@danpo
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Por b d u& iino dt nos, ok Eualquiar estadoo rondici6n que m, si ~m~tá&virrudtsao~odapmcuiprdbieay~deIp. m o ios ohos, 3 no sed nombmdo p m honrado, ai atpwdo, Uujc o soler, sino rina por w vidvd por pobre W j qw 4*, o n t s l $ ~ ~ u e d . hs a s b h y ~ ~ a ~ ~ ~ 6 ~ ' e r , n o a ~ & d e h o l a o i y dignwe pitblicss.
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