la confianza

LA CONFIANZA
Era una noche de otoño, caminaba sin rumbo por la amplia avenida, no veía la gente que cruzaba a su lado, ni sentía el motor de los coches que iban y venían.
Lana estaba en su oscuro ydesesperado mundo. Oía los turbulentos latidos de su corazón.
Estaba dolida.
No recordaba cuánto hacía que había leído por primera vez aquel mensaje.
Las palabras zumbaban en su mente. ¿Qué giroinesperado llevó a su hija a tomar aquella decisión que la desgarró?
Las lágrimas inundaban sus ojos y caían saladas entre la comisura de sus labios.
Se sentó en un banco.
Estaba cansada.
Apoyósu cabeza en el respaldo. El cielo negro salpicado de estrellas se le acercaba lentamente. Los latidos se fueron acallando.
Lana y su hija eran muy unidas. Habían compartido tantas aventuras.Recordaba cuando la pequeña nació, fue el momento más feliz de su vida. Aquel cuerpito suave y rosado se acurrucaba en su regazo, sentía su tibieza, el aroma a bebé.
Veía cómo correteaba siempre alegre,entre los verdes árboles, con otros niños, balanceando la rojiza cola de caballo.
Cuando transcurrió la adolescencia, fue su confidente de los encuentros y desencuentros amorosos.
Hoy era una mujer,inteligente, sensible, estaba orgullosa de su hija. No quería perderla.
De pronto abrió los ojos, vio el cielo gris-celeste. Las copas de los árboles tostadas se balanceaban suavemente.
¿Qué hacíaallí?
Iría a hablar con su hija. No podía dejar que se marchara. Su corazón iba a explotar.
Cruzaba la avenida. Un coche circulaba velozmente…
_ ¿Papá?
_ Sí Lana, vinimos a hablar contigo.
_¿Mamá?
_ Hija querida, entendemos tu dolor, tus deseos de cuidarla, pero debes dejarla ir.
_ Es muy riesgoso que entre en el mundo de su padre, por eso me vine.
_ Lana, los padres deseamos proteger anuestros hijos, pero es importante que ella confirme con sus ojos, con su corazón lo que tú le has dicho.
_ Irá a Nápoles. Sabrán que es su hija y estará en peligro.
_ Confía en ella, confía hija,...