La conspiracion de los alquimistas
Me había mudado a Paríspor éste baile.
Aqui conocería a la persona que podría darme el trabajo de escritora.
Arthur Evans, el científico más aclamado de los últimos dos años, podría contratarme para hacer algunosreportes de sus investigaciones.
Pues bien, con el vestido puesto, el peinado listo y mi corazón latiendo, entre en el gran salón donde la crema innata de París del año 1923, estaba reunida.
Susurré laoración que rezaba mi madre cuando yo era niña, sabía que esa fiesta podría cambiarme la vida. Y sí me la cambió, sólo que no fue la persona que yo esperaba.
Gracias a ese baile aprendí, que la vidaes un mundo de misterios sin resolver.
CAPITULO I : EL BAILE
Desde niña escribía todo. Cuando era pequeña me gustaba hacerles cartitas a mis padres y hermano. Mi abuelita decía que yo habíanacido con la pluma en la mano.
A mis padres no les extrañó que estudiara periodismo en la Universidad de Bournemouht, en Inglaterra, mi ciudad natal. Tampoco les extrañó que sacara muy buenas notas yun maestro me recomendara ante el señor Evans para que yo escribiera sus reportes de investigación.
Ya mi profesor, Paul Garner, había hablado con el señor Evans para hablarle lo mejor posiblesobre mí.
Conocería al señor Evans en un baile, realizado en honor de su cumpleaños número cincuenta. Me preparé para hablar con formalidad, caminar con elegancia y actuar casi como si perteneciera a laalta sociedad.
Mis padres eran campesinos de origen humilde, y así de humilde fue mi educación. Sin embargo ellos hicieron un gran esfuerzo por verme graduada de una Universidad y me inculcaronmuchos valores morales.
No actuaba fuera de lugar en ese baile, pero no me sentía tan a gusto en él. Me senté en una mesa apartada, donde pude mirar a todos los invitados. Las señoras vestían...
Regístrate para leer el documento completo.