La construcción de los espacios y la literatura en jlb y héctor tzön

La construcción de los espacios y la literatura en Jorge Luis Borges y Héctor Tizón


Siguiendo con lo que se afirma desde la cátedra: “Las ciudades representadas en los textos forman parte de la ciudad misma, son objetos necesarios para la construcción del propio sujeto poético” el l siguienteartículo intentará demostrar cómo los espacios (el barrio de Palermo de J. L. Borges y el desierto puneño de H. Tizón) simbolizan el lugar (ideológico) desde el cual se escribe literatura.
Habrá que señalar entonces que estos espacios, tanto en uno como en otro autor, además de espacios literarios, son espacios reales. Ahora bien, de qué manera son inscriptos en las obras para generar una identidadentre ambos. O lo que es igual, cuáles son los procedimientos que se llevan a cabo para generar una paralelo simbólico entre espacio y literatura.

Para comenzar a dar respuestas a estos interrogantes el análisis se iniciará desde fuera del texto (desde los prólogos) para luego continuar con un análisis intratextual.
Dado que es el prólogo, tal como lo define Maite Alvarado, el permiteinformar sobre el origen de la obra y sobre las circunstancias de la redacción, se considera de fundamental importancia su análisis. El mismo permitirá no sólo completar el sentido de aquello que se halla implícito en la obra, sino además situar al autor en relación respecto de la misma y por lo tanto de la literatura.

En las obras analizadas el prólogo se presenta como un discurso previo altexto, como una suerte de pasado a quien lo prologa. En este sentido se estará dando una orientación espacio temporal desde donde se construyen las historias, pero también desde donde se hace literatura.
En el prólogo a Borges declara: “Yo creí, durante años, haberme criado en un suburbio de Bs As […] lo cierto es que me crié en un jardín...y en una biblioteca de ilimitados libros ingleses”
Elautor se ubica así espacial y temporalmente para hacer literatura, pues fue el barrio de Palermo el espacio real en el que creció, pero será también un espacio construido imaginado para un personaje que, por otra parte no le era del todo desconocido . En Declaración agrega: “Pienso que el nombre de Evaristo Carriego pertenecerá a la eclessia vissibilis, de nuestra letras, cuyasinstituciones piadosas contarán definitivamente con él. Pienso también que pertenecerá a la más verdadera y reservada ecclesia invisibilis” El Autor se ubica así ideológicamente, enfrenta una poesía menor, local y popular, como es considerada la poética de Evaristo Carriego a una poesía de carácter más nacionalista, como era considerada la de Leopoldo Lugones. Al elegir a Evaristo Carriego, advierteBeatriz Sarlo, Borges está tomando posesión respecto de la literatura que lo precede, sólo la sensibilidad de un escritor culto podrá descubrir en Carriego una forma de lo que la literatura es verdaderamente en el Río de la Plata.

“Este libro no es de ninguna manera imaginario […] sino de una suma de recuerdos confusos…” (en “La mujer de Strasser”); “Así la escribí de un tirón y casi no le hecorregido nada. Toda mi vida he pasado junto a estos personajes y de este modo solo tuve que recordar para escribir” (en “El Hombre que llegó a un pueblo”). En ambos prólogos Héctor Tizón plantea, así, que si bien las historias fueron escritas por él no son productos de su imaginación, sino que forman parte de su pasado (por él vividas o a él contadas). De esta manera se estará aludiendo a unlugar espacial temporal e ideológico desde dónde escribe, además de anticipar las historias al lector.
El espacio temporal referido es un espacio que lo antecede o que ha formado parte de su infancia . Un lugar espacial, que aunque no aparece mencionado explícitamente en los prólogos siempre es el mismo, ese lugar es la Puna. Por último un lugar ideológico, que es a la vez existencialista e...