La Construcción Social Del Miedo

EL DIA QUE SE ACABO EL MUNDO
El 11 de agosto, según los vaticinios de Nostradamus sobre la llegada del Apocalipsis, no faltaron las interpretaciones del inicio del fin.
En una localidad de brasil (Paraíba) el comisario liberó a los únicos tres delincuentes que albergaba la pequeña cárcel. En Coblenza y Magdeburgo, Alemania, se produjeron suicidios provocados por el fin del mundo. En laprovincia de santa fe, argentina, se construyeron "búnkeres" donde se almacenaron alimentos y personas para resistir el cataclismo final. En México, miles de personas acudieron a las zonas arqueológicas para purificarse y reconciliarse con las fuerzas de la naturaleza. En Perú decenas subieron al Machu Pichu, en espera de los ovnis que los recogieran para salvarlos de la catástrofe. Miles de fielescatólicos acudieron a bendecir las velas que según el mensaje de la Virgen de Fátima, serían las únicas fuentes de luz durante los tres días que reinaría la oscuridad después del eclipse.
Muchas personas de variadas creencias y filiaciones políticas se prepararon para esperar el colapso final. No hubo oscuridad ni llegaron ovnis, las velas, comidas, provisiones, quedaron esperando otra oportunidad.
Semantuvo, sin embargo la violencia, el deterioro estructural, las inundaciones y catástrofes naturales que agudizan sus efectos por la pobreza estructural de quienes las padecen, siguieron las guerras y también el narcotráfico con su millonario y violento negocio.
Estas reacciones hablan sobre todo del temor con el que las personas enfrentan las señales de incertidumbre que Apocalipsis o noconstituyen el panorama social, político, económico y cultural que caracteriza el final del siglo XX.

DE LA FRAGILIDAD AL RIESGO

A lo largo de la historia la humanidad ha buscado diferentes mecanismos para enfrentar la fragilidad y vencer el miedo. Desde el amuleto protector hasta la constitución del estado. La historia cuenta la larga búsqueda para contrarrestar los efectos de las fuerzas queamenazan la certeza de la vida
En la modernidad, a la fragilidad de los cuerpos (enfermedad, fuerzas de la naturaleza, violencia de otros cuerpos) se responde con la ciencia y con el aparato jurídico. A la fragilidad del pacto social amenazado por la disidencia, rebeldía se responde con instituciones de socialización, con instituciones reguladoras de conflicto y con instituciones de control.
A laamenaza del deterioro del medio ambiente surgida por el progreso, se responde con refundación de la ciencia y la tecnología. Hoy el discurso de un desarrollo sostenible asume el rol de amuleto sobre la fragilidad.
A la fragilidad del cuerpo social amenazado por la pobreza, atraso, ignorancia se responde con la ingeniería política y social. En el plano moral, amenazado por la corrupción, perdidade valores, violencia incontenible, se responde con la expansión de dispositivos de vigilancia.
A la fragilidad del espíritu y la mente responde con iglesias, doctrinas, mandamientos, consejos y penitencias. El mercado con productos destinados al consumidor con malestares difusos.
Se suman nuevos riesgos, propios del estado actual de civilización y cultura. Según Ulrich Beck estos riesgos puedenpermanecer invisibles, sólo se establecen en el saber de ellos y pueden ser transformados, ampliados o reducidos, dramatizados o minimizados están abiertos a los procesos sociales de definición.
Ahí donde la ciencia y la fe balbucean intentos de respuesta toma fuerza el miedo y de manera paradójica, también la esperanza.
El miedo hoy se libera de su vergüenza y parece constituirse en la únicaemoción capaz de acercar la salvación. “Hay que tener miedo”, es la consigna. Sobre todo miedo de no experimentar el miedo salvador y quedar expuesto, sin amuletos, ante las fuerzas enemigas.
La sociedad avanza en un saber que es capaz de transformar la fragilidad en un riesgo calculado. En la misma medida puede constatarse el aumento de la brecha entre los llamados saberes expertos y el...