La Creatividad

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RAÚL SERRANO.
Nuevas Tesis sobre Stanislavski
Fundamentos para una teoría pedagógica.
Antual ediciones. Buenos Aires

LA CREATIVIDAD

En realidad el tema de la creatividad sería el único punto a desarrollar en la segunda parte de este libro. Si fuera posible "enseñar a crear" todos los problemas derivados de una pedagogía artística estarían resueltos. Más aun, si lacreatividad fuera una materia enseñable creo que debiera ser la única en el proceso educativo general, ya que de esa sola aptitud podrían derivarse todos los ulteriores conocimientos y habilidades.
Pero en mi ya larga experiencia como docente artístico -formador de actores- he llegado a la conclusión que no es factible enseñar a crear, otorgar a los egresados un diploma de artistas. A lo sumo, lo quepuede hacerse es -además de proporcionar al alumno todos los conocimientos técnicos posible levantar a su alrededor una atmósfera y circunstancias que le permitan "desarrollar su capacidad creadora" en vez de la cómoda actitud de amoldarla a cánones ya vigentes, sean cuales fueren.
Crear, consiste en generar hechos que se salen de la norma.
Todos los actos creativos que en el mundo hansido –ya que a ellos podemos referimos con una cierta objetividad han estado situados históricamente. Hubo un cierto desarrollo técnico que los permitió, una cierta estructura social que los favorece o dificulta, y una cultura que les suministra herramientas con o contra las cuales se ejercen. El "creador" no actúa pues ex nihilo como el del Génesis. Opera a partir de una situación concretamentedeterminada. De algún modo, negativo o positivo continúa una cultura.
Su creatividad quizás le permita aparentar que puede "salirse" de la historia, superar su propio tiempo y flotar en la eternidad. En muchos casos ha ocurrido así. Pero no es la ahistoricidad de esos actos la que les permite tamaña hazaña, sino más bien su contrario. Es justamente su poderoso afincamiento en el "aquí y ahora"de sus culturas y tiempo, la capacidad que tienen de registrar lo esencial de una época lo que los catapulta. O la perfección formal conseguida paralelamente.
Y el arte, por supuesto, no es el único terreno de la praxis en el que se expresa la creatividad humana, aunque aparece como el lugar específico para su manifestación. Si no existieran actos creativos en todos los terrenos de lacultura el hombre viviría, creo yo, en una especie de presente biológico que podríamos equiparar al de las especies animales. Pero es la cultura, alimentada esencialmente por la creatividad de muchos y la acumulación y trasmisión de esas conquistas novedosas y útiles, la que permite la historia. Y esa creatividad se eleva sobre el conocimiento social.
La regularidad de los procesos¡'técnico-naturales" parece oponerse a la libertad absoluta desde donde –aparentemente por lo menos- se pone en práctica la creatividad. Pero, en mi opinión, es un error separar de un modo metafísico la libertad de la necesidad. Es imposible, si no absurdo, dejar de enmarcar la creatividad dentro de la generalidad de las praxis humanas.
El trabajo -la forma más general y estudiada de la praxis podríaanalizarse desde sus dos extremos: uno de ellos es la objetividad de los materiales y de las herramientas utilizadas, y el otro, todavía inexistente, consiste en un proyecto, en una ideación, en una instancia imaginaria hasta su realización final. La praxis efectiva, y la creativamente ellas, debe probar su factibilidad, la posibilidad de la realización de aquella idea todavía irrealizada. Para ellodebe someterse a las legalidades ya existentes. La creatividad entrevé algo e intenta su realización y hasta es posible que en el diálogo con la materia misma entregue una tercera respuesta ni siquiera entrevista.
Así se establece un complicado vínculo entre la causalidad y la teleología propia del trabajo humano, entre los condicionamientos de la realidad y las libertades de la...