La crisis. del tijeretazo a la reforma laboral. narrativas hegemónicas y rituales políticos.

La Crisis.
(Del tijeretazo a la reforma laboral)
Narrativas hegemónicas y rituales políticos.

Monografía final Antropología Política Estudiante: Sarah Babiker Moreno

“La economía española ha entrado en esta legislatura en la Champions League de la Economía Mundiali” anunció Jose Luis Rodríguez Zapatero, inspirado, ante los miembros de su partido. Corría el año 2007, Zapatero presidía elgobierno del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), el crecimiento económico sería de un 3’6 % aquel añoii y, con un PIB de más de 1’3 billones de eurosiii España se había convertido en la octava economía mundialiv. En tal ciclo expansivo de la economía los socialistas habían aprovechado su legislatura para cumplir con su agenda progresista en el ámbito de las libertades civilesv y promoverpolíticas de transferenciasvi respaldados por el superávit en las cuentas del Estado, y sin cuestionar el modelo económico en el que se basaba ese crecimiento. A principios de 2012, cuando no había pasado ni un lustro de ese momento de entusiasmo, un nuevo presidente del gobierno, el conservador Mariano Rajoy, daba una rueda de prensa en la que afirmaba: “Pasaremos dificultades, muchas, pero no vamosa desfallecer porque sabemos de lo que son capaces los españoles.”vii En el tiempo trascurrido entre ambas comparecencias se perdieron casi tres millones de puestos de trabajo, el país había entrado en recesión, y figuraba desde hacía años en el club de los PIIGS.viii

En la siguientes páginas me centraré en los cambios que sufrió el discurso político durante el periodo comprendido entre eltriunfalismo de Zapatero y las sombrías declaraciones de Rajoy, en el repertorio hegemónico de diagnósticos sobre la situación que se impuso y, sobretodo, en el modo en el que se fueron redefiniendo los límites de lo posible desde el poder, hasta acabar generando, amparados por un ritmo frenético, unas nuevas reglas del juegoix. No es mi intención aportar una narrativa objetiva de lo sucedido. Tampocodar mi versión de los hechosx. Si no deconstruir los principales relatos de las autoridades políticas en rituales clave durante el trascurso de esta última fase de la crisisxi, relatos reflejados más o menos acríticamente por los medios, y que delimitan los términos del debate, proyectando oscuridad hacia las causas de la situación, las consecuencias, y sobre todo, hacia la posibilidad dereaccionar de otro modo. En realidad el periodo que quiero recorrer, no parte de ese año antes de la caída, si no que arranca en la presentación de los primeros grandes recortes presupuestarios de mayo de 2010, y su retórica del sacrificio necesario. Antes de emprender este análisis, considero oportuno reproducir aquí una narrativa “mainstream” de los antecedentes a los recortes, con el fin de situar elproblema. La crisis comienza en 2007 en Estados Unidos, y se precipita un año después con la quiebra de Lehman Brothersxii. La debacle financiera se expande por todo el sistema a través de los activos tóxicos, descubriendo una burbuja crediticia global que afectará gravemente (también) a los bancos españoles. Paralelamente en España otra burbuja, la inmobiliaria, está a punto de eclosionar. Ambasexplosiones simultáneas hieren profundamente la economía del país - pues el crecimiento que le había situado en la “Champions League” estaba basado precisamente en la construcción y el crédito – resultando en recesión y una sangría de empleo.xiii El gobierno español tarda meses en reconocer la gravedad de la situación, así, no es hasta bien entrado el 2008, tras imponerse de nuevo el PSOE en laselecciones, que comienza a impulsar planes de estímulo económico, acompañados por medidas para recapitalizar los maltrechos bancos. Estamos en el preámbulo de la fase de la crisis que será objeto de mi estudio: los ataques a la deuda soberana de los Estados más afectados por la crisis por parte de los mercados financieros. Es esta crisis de la deuda la que impone el cambio de discurso que...