La Cristiada

LA CRISTIADA

Existe un México visible y uno invisible, a este último pertenece la gente del campo que, que constituye como mayoría “la nación” y sin embargo no se toma en cuenta en la dirección del Estado ni por los intelectuales. Por esto, cuando se movilizan causan un horror semejante al que causan los terremotos o los huracanes, es decir imprevisible e inesperado.
La Cristiada es laguerra que sorprende tanto a las personas como a las instituciones, al ejército, al gobierno, a la iglesia y a los levantados mismos. Existe una contradicción entre la lentitud y el estancamiento del conflicto político Iglesia-Estado y el repentino levantamiento popular y pueblerino, sin preparación, sin organización (partidaria o de ninguna institución confesional)
Cuando el Estado acorrala a laIglesia en 1926, ésta decide suspender los cultos y el gobierno ante esta huelga del culto público, responde con la prohibición del culto privado, así el pueblo se encuentra sin poder realizar los sacramentos, no se puede bautizar a los hijos, no se pueden casar, ni confesar ni comulgar.
La crisis política tiene mucho que ver con la crisis religiosa, éstas se perciben más pronto en Jalisco, Colima,Nayarit, Aguascalientes, Durango Michoacán, Zacatecas. El Gobierno controla el aparato del poder, pero pierde la autoridad política; cuando el control aumenta crecen las hostilidades y la resistencia pasiva; pero cuando viene la suspensión de los cultos, por primera vez se ataca al gobierno desde afuera no con una lucha civil sino con una de rebelión, de venganza y revancha contra los lídereslocales, que han sido los enemigos de muchos años. La Cristiada es el enfrentamiento más grave en donde todos los católicos son incitados a levantarse.

El levantamiento.
¿Cómo se decidió al levantamiento? Desde febrero de 1925 el pueblo se sentía agitado, el gobierno veía despectivamente todas las intenciones pacíficas por hacer llegar al Congreso las propuestas y peticiones del pueblo, estoaunado a la opresión, la confiscación de los bienes particulares y matanza del Estado hacia los católicos hizo que se unieran gente armada y dispuesta a la guerra en defensa de la “libertad de Dios y de los prójimos”. Se reunían en asambleas donde planteaban claramente el problema y se hablaba con la verdad sobre el destino que les esperaba (la muerte en la mayoría de los casos), y aunque todostenían miedo y se sentían incapaces de luchar, cuando preguntaban la vía que deberían seguir, todos coincidían en “una revolución”.
Los últimos recursos pacíficos de la petición se dieron a partir del 31 de julio de 1926, pero las medidas del Gobierno que ponía en pie de guerra al ejército, reclutaba agraristas, desarmaba a los particulares y a las defensas sociales, confiscaba los caballos einstalaba guarniciones precipitaron los acontecimientos y después de los primeros levantamientos, el Gobierno hizo detener a los sacerdotes por simples sospechas, lo que provocó nuevos levantamientos que acabaron convenciendo de participar a los remisos.
Para el pueblo la paciencia, la penitencia y las oraciones de 5 meses no habían servido de nada y la revolución estalló en enero de 1927 y un grupo decatólicos se levantó en armas contra el gobierno de Calles al grito de “¡Viva Cristo Rey y la Virgen de Guadalupe!” ante el asombro de las autoridades locales y federales. Esta lucha tuvo características políticas y sociales, pero esencialmente fue religiosa: el Estado se había metido con la religión en su intento de erradicar el catolicismo y había perturbado gravemente la vida cotidiana,espiritual, afectiva, y cultural no sólo de un pequeño sector, sino de la gran mayoría de los pueblos de México.
En los primeros días de 1927 todo el centro-oeste obedeció la orden de levantamiento general dada por los jefes de la Unión Popular, incitados por la Liga, que quiso aprovechar el movimiento para tomar el poder a través de un golpe popular y campesino, sin embargo al no poder abastecer a...