La cuarentona
Hoy, señor quiero presentar ante ti una oración
por aquel niño que se graduó con honor.
Sí, ése que aspiraba ser un gran doctor.
Con ilusión viajóa la gran nación
y su sueño en realidad convirtió.
Allá en Yale todo un pediatra se volvió
y de Harvard hecho un cirujano salió.
Sin vacilar a su Puerto Rico regresó.Gracias por usarlo como instrumento
Y devolverles la salud a muchos niños.
El gran cirujano pediátrico no se conformó
y una maestría en salud publica estudio.
Era todoun experto, y por eso más alto aspiro.
No era suficiente su destacada labor por eso en 1992,
el Gobernador número seis de Puerto Rico se convirtió.
!Qué orgullo! Aqueldoctor venía a sanar las heridas de un pueblo.
Con el innovador proyecto “Alianza para tú salud” nos convenció.
Pero de repente solo tú señor y el saben lo que pasó.Quizás ese viaje a la “gran nación” sus intereses le cambio.
De repente, nos casó el inglés con el español, creando mucha confusión.
Así fue como poco a poco “la mano dura”cayó sobre todos.
Y como Pedro Navaja el doctor se iba poniendo misterioso.
MI corazón se destruyó, el día que su cargo como gobernador entregó.
Como vil ladrón en lanoche huyó.
Y solamente nos dejó sus célebres palabras:
“ahí te dejo ése desastre, arréglatelas como puedas”
“Franklin my dear I don’t give a damn”
Perdónalo, mi queridoseñor porque quizás no era su intención.
Y solo fue su confusión la que derribo todo lo que construyó.
Mi querido doctor estaba enfermo en su corazón.
Por eso, señor, sé túel cirujano especialista que ayude a sanar
al Dr. Pedro Juan Rosselló González.
Quizás solo fue que de la gran nación se enamoró
y el amor por Puerto Rico olvidó.
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