La culpa

La culpa y el sistema judicial de los cielos
La mayor parte de los seres humanos tememos la muerte, pero uno de los más importantes motivos de ese miedo es que nos han dicho que tal evento no termina ahí: Sugieren que hay otra vida donde nos van a juzgar, nos sentaremos ante el Supremo Tribunal de Justicia del cielo a escuchar la tronante sentencia que nos tienen reservada. Según dicen, cuandollegamos ya está completo el expediente y la sentencia.
No existe un sistema judicial en la tierra tan injusto e implacable como el que nos describen: Nacemos culpables, sin haber pedido nacer, tampoco sabemos que fue lo que hicimos mal, ya que apenas con la luz de la existencia nos hicieron reos de culpa. Los juzgadores no ignoran nada de nuestro paso por este valle de lágrimas, conocen hastanuestros secretos más íntimos de alcoba. En la portada del expediente, con letras mayúsculas rojas, se lee: “Culpable desde el nacimiento”.
A nadie le cabe la menor duda de que los sistemas judiciales de este mundo son terriblemente defectuosos; no hay quien ignore las terribles fallas cometidas por ministerios públicos, jueces de primera y segunda instancia y hasta supremos tribunales. Peroningún tribunal terrestre, pese a sus serias imperfecciones, presume la culpabilidad de una persona desde su nacimiento.
¿Cómo puede ser que en un cielo, que se supone es la excelsitud de la perfección, se haga esa excepción a un importante principio jurídico? Porque ahí, en ese cielo, nadie es presunto sino francamente culpable durante toda su vida y hasta en el lecho de muerte y después de la muerte,así lo dice el expediente… ¡Pero, pensar que la culpa es debida a una desobediencia vinculada a un supuesto acto tan natural como el sexo de la pareja y se trasmite mediante el sexo a todas las generaciones sucesivas y por tal motivo al nacer ya se lleva la imborrable culpa! Lo anterior, rompe con toda teoría jurídica. Hay enfermedades congénitas, pero ¿pecados congénitos...?
Hay otros temasimportantes en relación a la judicatura celeste, uno es la proporcionalidad de la sentencia; ningún juez terrestre impondría a una persona un castigo eterno, por una falta temporal.
El motivo de la falta también es importante. La justicia humana castiga actos que transgreden la ley, pero si castigara pensamientos los jueces no terminarían nunca. En ese cielo, los castigos se imponen por faltascometidas en pensamiento, palabra, obra y omisión, de modo que no hay quien quede libre de culpa, siempre se vive con culpas y culpables. Si no es por una es por otro, ¡Siempre culpable…!
En ningún país se castiga o se condena el atractivo femenino, una mujer hermosa debiese ser lo más bello del mundo... Pero, ¿no fue acaso un alto jerarca de Jalisco, que dice representar a un cielo, quien afirmó queel problema con las mujeres violadas es el resultado de la manera como se visten? El tema no es cómo se visten, sino la lujuria del jerarca…porque la belleza es esplendor, es el bálsamo de la vida, es el eterno femenino.
A esas supuestas transgresiones o crímenes contra los cielos, le llaman pecado. Si hay algo que haya hecho sufrir a la humanidad es el concepto del pecado y el supuesto fuegocon el que se purga. Cuando a un creyente se le hace sentir gran pecador se debate en una tremenda culpa y su vida se convierte en el umbral del infierno, a la espera del Juicio Final. No duerme, se pega en el pecho y dice: ¡por mi culpa, por mi gravísima culpa!
En México, la imperfecta justicia castiga con la privación de la libertad, pero en los cielos se castiga con martirios eindescriptibles suplicios eternos: Algunos representantes de estos reinos celestes, nos informan que en el infierno encontraremos ollas en ebullición, patíbulos, grilletes, látigos, alimañas... Los réprobos comen culebras y excrementos, beben orina y bilis. Serpientes y sapos devoran el sexo de los lujuriosos; los golosos devoran sus propios miembros; a los avaros se les hace tragar oro derretido…
Todos...