La Cultura Infantil Y Las Películas De Walt Disney.

La cultura infantil y las películas de Walt Disney.

Una de las conjeturas que la Escuela de Frankfurt trata es la Teoría Crítica que surge de la no aceptación de un estado histórico/económico/político en el que lo que “es” no “debería ser”. En su momento, esta teoría venia contextualizada por la dominación nazi, donde lo que estaba impuesto eran unos ideales a favor del nazismo y del lucro delos que dirigían el movimiento. Las manipulaciones políticas se vieron reforzadas fruto de la evolución de la tecnología y las masas aceptaban lo que los medios de comunicación difundían.
La Disney pretende evocar una imagen de un universo seguro, inocente y mágico de forma tal, a hacer creer al público receptor que ésa es o debería ser la vida “real”. Independientemente de la realizaciónde producciones cinematográficas también ha creado parques temáticos caracterizados por pueblecitos con ficticios comercios, barberías entre otros, que “existen para ocultar el hecho de que el país “real”, toda Norteamérica “real”, es Disneylandia”[1]. Por tanto es un ejemplo evidente de la premisa que exponen los pensadores de la Escuela de Frankfurt, Disney da a entender al público y a las masasque ése es el mundo, que así debería ser , sin embargo es un mundo imaginario con el que manipulan a los niños (target principal al que se dirigen). Como apunta Walter Benjamin, el cine tiene mucho poder para difundir ideas en las masas a través de la manipulación de las imágenes, y dichas masas aceptan estos valores de forma inconsciente. En general los niños adoran a las criaturas que lessugieren ternura, bondad y diversión. La gran mayoría de niñas aspiran a sentirse identificadas con el papel de alguna de las princesas mientras que los niños tienden a desear aptitudes aventureras. Esto supone un problema.
En primer lugar, porque los niños encontrándose ante unas capacidades inadecuadas que les facilite hacer uso de la razón (elemento fundamental para los frankfurtianos parallevar a cabo una fuerza crítica), se adaptan al presunto mundo idílico que Disney lanza y lo aceptan tal y como es. Tras esta aceptación y más bien éxito hacia todo lo que rodea la Industria Disney, el público infantil y junto a él, los adultos de la sociedad, consumen no solo las películas si no todos y cada uno de los productos que Disney crea. Por tanto, esta compañía obtiene su “principal” fin(dada la actual situación de las estructuras de poder) que es lucrarse y alcanzar el máximo beneficio de su producción. Esto ratifica otro de los valores inculcados por la Escuela de Frankfurt, basándose en la sociedad como elemento de consumo, donde ésta convierte a los sujetos en objetos y los objetos que consume se convierten en el fin que “debe” conseguir el individuo para formar sucultura.
Por otro lado, Disney se defiende a sí misma como una corporación con pretensiones culturales y educativas bajo un formato de entretenimiento dirigidas al público infantil. No obstante, el artículo destapa numerosos ejemplos de los cuentos donde se esconden significados silenciados, que lejos de querer inculcar algo educativo en los niños, difunden mensajes subliminales. Estos van desde el rolde la mujer/chica como ama de casa, mujer objeto connotado sexualmente, cuya representación no cobra identidad hasta que se ven salvadas por un individuo masculino, pasando por detalles racistas en dirección al pueblo árabe, hasta el estímulo de la rebeldía que ejercen los personajes principales frente al sometimiento de una familia conservadora.
Por tanto los conocimientos que absorben losniños mediante la Disney serían dotados bajo el punto de vista frankfurtiano, como una construcción de la pseudocultura es decir, la visualización en este caso, de una serie de contenidos específicos repetitivos que conforman una cultura homogénea donde la razón y la crítica tienen poco que aportar.

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