La democracia oligárquica

La democracia oligárquica
Por José Pérez Jiménez
pepesol2@yahoo.es

Evitar que las cosas sean asumidas –todas ellas- con la más absoluta “normalidad” es una tarea asumida por el hombre desde quese opuso a la historia revelada. Preguntarnos entonces por cómo se “compran, “adquieren”, o “acceden” a mejores sitiales en la procesión por el poder no solo debe preocuparnos por cuestiones morales ode vigilancia estricta de lo que dice la ley electoral. Hay razones de mayor envergadura que no podemos ignorar. Como por ejemplo, preguntarnos sobre qué bases sociales se asienta nuestra democracia.El historiador Jorge Basadre –hace buen tiempo atrás- invitaba a reflexionar en este sentido y algunos grandes pensadores de la sociedad peruana como Alberto Flores o Nelson Manrique lo han hecho coneficiente hondura y propiedad.
Al preguntarnos acerca de las bases sociales de nuestra y actual democracia se constata cómo ésta es cada vez más oligárquica. Quienes a tropelía rechazarán estaidea seguramente acudirán a la clásica delimitación entre oligarquía y democracia: la primera como el gobierno de pocos mientras que la segunda por contraposición como el gobierno de muchos.Consecuentemente la sociedad peruana por su complejidad es democrática en tanto su población tiene representación en municipios, gobiernos y consejos regionales, parlamento y gobierno central. Hasta allí, todoparece funcionar. ¿Pero qué pasa cuando los ciudadanos que se instalaron en la lista de candidatos no lo hicieron por su compromiso político si no por el aporte económico a la campaña? ¿No es acaso unamanera de seleccionar entre los que más tienen y desalojar a los que menos o nada tienen para “aportar” económicamente? Puede más la oferta que el compromiso político. Luego, el elector refrenda estademocracia eligiendo entre los únicos que quedaron que por clara coincidencia les tocó los numerales claves en el orden de la lista. ¿Se puede entonces luego hablar de un gobierno de mayorías? La...