La Dignidad Del Hombre Y La Formación Humanística

LA DIGNIDAD DEL HOMBRE Y LA FORMACIÓN HUMANÍSTICA
Ibáñez Martín José, 1989 - Hacia una Formación Humanista Objetivos de la Educación en la Sociedad Científica - Técnica.- Edit. Heder, Barcelona España.
Hemos visto que la primera condición para que pueda hablarse de auténtico humanismo es la existencia de una idea directriz acerca del hombre superior. En otros términos, todo humanismo debeconocer las causas de la dignidad humana, y de este conocimiento surgirán criterios de actuación, positivos o negativos. Pero, naturalmente, antes de intentar saber en qué consiste la dignidad humana, conviene saber con exactitud qué se entiende por dignidad. Dignidad significa excelencia, que, según el diccionario de la Academia, quiere decir «superior calidad o bondad que constituye y hace dignade singular aprecio y estimación en su género una cosa». Como se ve la dignidad puede hacer referencia sólo al ser de, una cosa si bien también puede aplicarse a la que se deriva del singular aprecio que determinada actuación ajena produce en nosotros.
Evidentemente cuando se habla de la dignidad natural de la persona humana no se trata de aquella dignidad que tienen quienes conducen una vidaejemplar digna de apreciarse. Más bien debemos reconocer que se trata de la dignidad que el hombre, prescindiendo de las características de su actuación, tiene como hombre y que nunca puede olvidarse, por muy abyecta que su conducta sea. Esto no significa, sin embargo que la única dignidad que el hombre tiene sea la que por su ser le compete. Por el contrario, esa dignidad es simplemente un don deDios que como tal se recibe pero para el que no hay mérito o grado. Comentaba Ortega que «mientras el tigre no puede desintegrarse el hombre vive en riesgo permanente de deshumanizarse. Estas palabras encajan en el contexto filosófico orteguiano: sobre ellas deberá argumentarse que el hombre siempre será hombre , si bien su peculiar modo de ser es tal que le permite contradecir, con sus actos, supropia naturaleza, de forma que consiga no alcanzar por la maldad de sus obras, aquella segunda dignidad que sería consentania a su naturaleza. Por ende, hablar de la dignidad que a causa de las obras puede correspondernos es de gran utilidad y sobre todo en un contexto educativo donde se nos deben proponer las metas que podemos alcanzar y en donde debemos hallar el alimento oportuno paraembarcarnos en su búsqueda. Procedamos, por tanto, a analizar estas os dignidades que el hombre puede poseer y la misión que debe encomendarse a la actividad formativa en este campo.
¿Por qué se dice del hombre que tiene una superior calidad?
Ninguno de los seres de la naturaleza nos hemos hecho a nosotros mismos sino que nos hemos limitado a recibir el ser. y. por ello, desde este punto de vista,nadie puede ser considerado más digno que otro, puesto', que todos tenemos la común cualidad de haber sido hechos. Pero eso no quiere decir que todos hayamos sido hechos de la misma manera. Mientras que las acciones de los restantes seres fluyen de un modo espontáneo ynecesario del tipo de naturaleza que han recibido no ocurre lo mismo en el caso del hombre. Las acciones que el hombre realiza notienen todas como causa la eficacia incondicional del principio natural. Al contrario el hombre es libre por naturaleza. Puede escoger entre varias alternativas, puede obrar o no obrar, puede orientar el conjunto de su existencia en mi sentido o en otro, puede negar a quien le ha dado el ser, y luchar, como hemos dicho, contra la naturaleza recibida. Por consiguiente vemos que la raíz de esta superiorcalidad está precisamente en la condición libre del ser humano. Nuestra investigación habría terminado aquí si la libertad del hombre se pudiera ejercer sin ulteriores presupuestos. Pero no es tal la realidad. No debe confundirse libertad con espontaneidad, y así «la libertad no es posible sin el entendimiento: (...) para que acto sea libre es preciso que sea deliberado, es decir, previamente...