La Educación Cuantica

La educación cuántica (I): fundamentos
Amador Martos | octubre 2, 2013 | POLÍTICA, ECONOMÍA Y SOCIEDAD » Un minero en el Parlamento »
La humanidad se halla ante nuevas reglas del pensamiento de las que la ciencia todavía no ha descubierto su funcionamiento, pero presentes en el conocimiento esotérico de la filosofía perenne. Por otro lado, hay cada vez más personas con una visión holística dela naturaleza, que sienten una profunda simbiosis con todo lo existente en este y en otros mundos, que dirigen su mirada hacia el interior y que propugnan una recuperación de los derechos humanos violados por un corrupto sistema capitalista donde siempre pierden los de abajo. En suma, son personas cuyo ego es trascendido mediante El racionalismo espiritual, expandiendo así su conciencia personalhacia la transpersonal y colaborando en la evolución holística de la noosfera.

La aprehensión de lo anterior no se da exclusivamente en la comprensión cognitiva, sino que viene acompañada de una experiencia espiritual conocida como El despertar de la conciencia, un sendero que el inconmensurable Platón nos dio a conocer a través del Mito de la Caverna. El camino ascendente de la conciencia haciala sabiduría, que posibilita salir del mundo de las sombras, es tan sólo la mitad del recorrido. Como el esclavo liberado que ha visto la luz, hay que retornar al mundo de las sombras para contagiar de la buena nueva a los demás ignorantes esclavizados por un caduco sistema de creencias, todo un reto para los actuales “activistas cuánticos” que tienen que luchar contra una poderosa masa críticaartificiosamente manipulada, como evidencio en mi artículo El origen de la ignorancia.

¿Cómo llevar a cabo tal tarea de alumbramiento cognitivo y espiritual? Ni más ni menos que con una actitud pedagógica que, dicho sea de paso, es lo que pretende esta sección de La Columnata a modo de “wikifilosofía”, la cual permite al avezado lector ascender en el pensamiento complejo mediante los sucesivosenlaces de mis artículos. Esta actitud pedagógica, bien entendida, puede considerarse como un asesoramiento filosófico, un movimiento en expansión desde aproximadamente una década y que ha quedado explicitado en mi artículo Pensamos, luego existimos.

La filosofía, a través de diversos pensadores entre los que me incluyo, está reivindicando su razón de ser, la cual ha sido denostada por lospoderes fácticos y reducida a su mínima expresión por el mecanicismo científico que, en su miopía, ha despreciado la conciencia. El materialismo científico está siendo puesto en duda, no sólo por pensadores como Ken Wilber, sino por una retahíla de “activistas cuánticos” que asumen que la conciencia no procede de la materia, sino que esta es el soporte para la expresión y expansión de aquella.

Laevolución holística también afecta al paradigma científico: se ha realizado la transición desde la física clásica a la física cuántica (dos opuestos más, como postula Heráclito), pero sin que el racionalismo pragmático, sobre todo alentado por el movimiento escéptico al servicio de los poderes fácticos, se avenga a admitir la existencia de su contrario, el racionalismo espiritual.
El racionalismopragmático, como demuestra esta artificiosa crisis, está agonizando ante un emergente racionalismo espiritual: lo viejo no acaba de morir y lo nuevo no acaba de nacer. El racionalismo espiritual es un nuevo paradigma del conocimiento que integra la racionalidad y la espiritualidad, una manifestación que se da en la conciencia, ahora sí, postulada y enarbolada esta por la física cuántica, en totalcontraposición al caduco materialismo científico.
¿Qué culpa tenemos las pensadores espirituales si es la propia ciencia quien ha puesto, como se diría popularmente, a huevo, el nuevo paradigma de conocimiento, conciencia y campo cuántico, como he pretendido relacionar en mi artículo La mente cuántica?

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