La educación cívica y la formación ciudadana
De hecho, puede decirse que el objetivo último del sistema educativo en cualquier estadodemocrático es preparar a la siguiente generación de ciudadanos para que fortalezcan, aumenten y mantengan la democracia. Audigier (1996) ha sostenido que, en tiempos de crisis y dificultad, lanecesidad de educación para la ciudadanía democrática –con el énfasis en la democracia, la paz, la justicia social y los derechos humanos– aumenta llamativamente. Más en concreto, hoy nos enfrentamos a unacreciente violencia en las escuelas, a brotes de racismo y xenofobia dentro de sociedades multiculturales, al absentismo político e incluso al resurgir de los movimientos extremistas y separatistas.Estos fenómenos, junto con los de globalización en el campo económico, tecnológico y de la comunicación, nos obligan a reconsiderar nuestras ideas sobre la ciudadanía y sobre cómo ésta se inculca.
Laeducación ciudadana se ha convertido en una necesidad acuciante, especialmente en nuestro contexto europeo, dado que estamos interesados en crear una ciudadanía supranacional, y esto exige lareconciliación de la identidad nacional con una pluralidad de culturas para construir una sociedad multicultural estable.
El cambio de paradigma: de educación cívica a Formación Ciudadana, esta últimainvolucra el tratamiento integrado de problemáticas sociopolíticas y económicas que afectan la toma de decisiones y actitudes de los ciudadanos hacia la democracia. En este sentido, forma parte de un...
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