La educación según Juan Funger

 LA EDUCACIÓN DE LOS JÓVENES SEGÚN EL HUMANISTA JUAN FUNGER



Resumen Juan Funger es un escritor holandés renacentista autor de “La Correcta Formación y Educación de los jóvenes”, editada en Amberes (Bélgica) por Cristóbal Plantino en 1584. El original latino ha sido recientemente traducido al castellano y consta de treinta capítulos. En su libro, Funger trata sobre el contenido de losestudios, los hábitos de trabajo intelectual de los estudiantes, las virtudes que deben adquirir y los vicios que deben evitar.


Palabras clave: Juan Funger; educación; jóvenes.


“La Correcta Formación y Educación de los jóvenes” es el título de la obra escrita por el holandés Juan Funger y editada en Amberes (Bélgica) en 1584 por Cristóbal Plantino. Dividido en treinta capítulos, el libroestá dedicado a los benefactores holandeses que han pagado la edición y merecen alabanza por su filantropía y su benevolencia hacia los alumnos de las Musas1.

Esta obra, escrita originalmente en latín, ha sido recientemente traducida al castellano por José Gordillo, miembro del GEMYR (Grupo de Estudios e Investigación Medievales y Renacentistas) dirigido por el Profesor Javier Vergara Ciordia,de la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) de Madrid (España).

Funger se dirige después al lector, indicando que va a tratar temas abordados por muchos insignes autores a lo largo de la historia, pero que sin embargo, su libro no es una simple copia de lo que han dicho otros previamente, aunque los tenga en cuenta. De hecho, como buen escritor del Renacimiento citaconstantemente a los clásicos.

El autor afirma que los niños son como vasijas de barro que guardan el olor del primer líquido que contienen, o bien, que son como semillas que arraigan en forma de tiernas plantas. Conservarlos en óptimas condiciones es una obligación de los padres. Hay que evitar que los malos ejemplos puedan desedificar a los niños, así como darles demasiados mimos.

“Lo primero que hayque buscar para que el niño reciba desde su más tierna infancia una esmerada educación con un maestro o un sabio”2. Con estas palabras inicia Funger el capítulo dedicado a los maestros, aclarando inmediatamente que hay muchos falsos sabios que simplemente tienen un “pico de oro”.
Características de un buen maestro: saber advertir los defectos de sus estudiantes; nobleza de costumbres; moderadosen la ira y en los castigos, eviten hacer el payaso; concisos y claros cuando enseñen; recuerden que han de dar cuenta ante el tribunal de Dios; repetirán las lecciones para fortalecer la memoria de los alumnos; no deben participar en los juegos para no disminuir su autoridad; deben conocer la variedad de caracteres de sus alumnos y tenerlos en cuenta a la hora de enseñarles; tienen que mostrarla nobleza y utilidad de las artes liberales que deben ir unidas a la virtud y la piedad3; deben enseñar latín a los niños desde temprana edad (Funger dice textualmente desde que los niños balbucean); se debe premiar a los niños con dulces caramelos y los castigos deben resultar odiosos4.

Sobre la edad para iniciarse en los estudios, hay discrepancia en los autores clásicos: unos consideranadecuado empezar a los 6 ó 7 años, otros, en cambio, lo retrasan hasta los 10.
En cuanto son capaces de leer, hay que facilitarles sentencias y dichos de grandes filósofos y poetas para que en sus mentes infantiles vayan calando sus enseñanzas, a la vez que entrenan su memoria. Afirma Funger que los alumnos siempre deben leer en voz alta para ayudar a la correcta comprensión del texto y, segúnse creía en la Antigüedad, para hacer bien la digestión. Si el alumno se niega a leer en voz alta primero hay que halagarle y luego azuzarle5. No obstante es preferible que los alumnos guarden un buen recuerdo de su maestro por haber conseguido de él el honroso premio del conocimiento6.

Ordinariamente para que los alumnos cumplan sus deberes será suficiente halagarles o bien amenazarles de...