La expulsión de los moriscos

La Expulsión de los moriscos
Desde que se les obligó a convertirse al cristianismo en tiempos de los Reyes Católicos, los moriscos fueron vistos como un peligro por las autoridades y por lapoblación cristiana. Esta explosiva situación condujo a su salida de España, decretada por Felipe III en 1609.
Durante el siglo XVI, los descendientes de los musulmanes de al-Andalus se esforzaron pormantener sus costumbres y sus creencias, frente al acoso de la monarquía y la Inquisición. Tras la conquista de Granada en 1492, los musulmanes de la ciudad conservaron su religión y sus costumbres, pero en1501 fueron obligados a convertirse. Justo antes de entrar en Granada, los Reyes Católicos habían firmado unas capitulaciones con Muhammad XII, último rey de Granada, según las cuales la poblaciónmusulmana de la ciudad podría permanecer allí conservando su religión y sus costumbres. Pero menos de diez años después, Fernando II renegaba de esta promesa e imponía a los musulmanes del reino deGranada la obligación de convertirse al cristianismo si querían permanecer en España.
Los vencidos en 1492 quedaron así reducidos a la triste condición de conversos forzosos, que sentían un íntimo rechazopor la religión que se les imponía y que, además, eran vistos con enorme recelo por sus compatriotas «cristianos viejos». Este acontecimiento fue en cierto modo inesperado, ya que hasta 1492 habíaexistido en la España medieval una tradición de tolerancia y convivencia entre gentes de distinta cultura y religión. Los musulmanes que vivían en territorio cristiano se llamaban mudéjares, términoderivado del árabe ‘mudayyan’ o ‘dayyan’ que significa «gentes domesticadas». Los monarcas impulsaron, inmediatamente después de la conquista del reino nazarí, una ingente labor de conversión de losmudéjares por métodos pacíficos, tarea que encomendaron a una gran figura de la Iglesia española de la época: fray Hernando de Talavera, primer arzobispo de Granada entre 1492 y 1507. El arzobispo...