La fiesta de las balas

Tema: Ley Turbia
Edmundo Valades, Las Raíces Irritadas,

Un ambiente de trabajo laboral, cargado con un aire de opresión, de temor, hace que aquel que llego un día a convertirse en administrador debido a su sabiduría de números, tenga que vivir cuidando todo lo que dice o lo que hace, sin siquiera poder mantener una conversación, irse al monte a beber parece ser la mejor cura, poder dormir ydisfrutar un poco del sueño, que nos aleja de la realidad, hasta que somos alcanzado por las pesadillas y volvemos a caer en un estado que nos recuerda todo, toda la realidad.
El Administrador va al pueblo, eran días festivos en aquel pueblo, entre tanta gente logra ver una muchacha que llama su atención, se puso realmente atento a aquella muchacha, hasta que sonaron unos balazos, una personafue acercándosele y soltando mucha información le logro decir al administrador:
-Mataron tres hombres.
Debido a la discreción que siempre se mantenía el Administrador, habían ciertos rumores que se corrían de que había matado hombres, los pistoleros de su patrón llegaron a querer saber si la cantidad de hombres que el Administrador había matado era mayor que la de ellos, sin embargo nunca lesrespondía, fue esta la discreción que apoyo a tener un respeto ante ellos el Administrador, allí se vivía de la discreción, del temor de poder ser cargado por el jefe y mas aun por sus pistoleros.
Un día, el Administrador descubrió a el hijo del patrón forzar a una muchacha, esto le lleno de cólera, ya que le hizo recordar a aquella muchacha que había visto el día que mataron a tres hombres, llego aimaginarse que el hijo del patrón pudiera llegar a hacerle eso a la muchacha, y mas rabia aun de pensar que no podría decir nada si algo llegase a suceder, viendo al papa de la muchacha que fue acecinado al ir a reclamar.
El poquitero llamo al Administrador, tenia un trabajo para el, su primer trabajo, llevarte a un tal Asunción dinero, que el poquitero le prestaba, al no conocer el camino lefueron prestados dos hombres para poder acompañarlo, se fueron temprano por la mañana, había una espesa neblina en el camino y hacia tan frio que un vaho salía de sus bocas.
Al llegar a esa casa, la casa de aquel Asunción, notaron que ya los estaban esperando en la puerta, Asunción se porto muy amable con ellos, les ofreció algo de beber, les abrió su casa, el olor de la cocina abría cualquierapetito y comenzaron a hablar sobre lo que tenia que firmar de aquel préstamo, mientras eso volvió a ver a la muchacha del pueblo, su nombre era Gertrudis y era para mi sorpresa hija de Asunción.
Aquel Administrador se encontraba atento, a poder ver pasar a Gertrudis, el era un hombre solo y corría de la emoción de poder llegarla a conquistar de la manera buena, sin mas tuvo que volver a la finca ala vida de un perro del patrón, no le parecía que el fuera autoridad absoluta, que abusaba de su poder y con el que todos estaban de acuerdo, nada era justicia, ni nadie podía hacerla, solo él.
Era tiempo de recoger el café, su precio había bajado y tenia que darle una nueva visita al tal Asunción, era otro trabajo, le tenia que llevar un nuevo papel que había que firmar, en el cual decía queahora en lugar de 30 tendrían que ser cincuenta quintales de café, tenia que llevar esta vez cuatro hombres, la cosa se podría poner fea y sin mas el Administrador se fue.
Al llegar a la casa de poquitero parecía que nuevamente los esperaba en la puerta, parecía ser un buen hombre, un hombre trabajador, pero al decirle de lo de la baja del café, todo comenzó a cargarse de un aire de violencia, elmismo que llevábaban al caminar hacia la casa esa.
Llegaron a sonar unos balazos, se vieron en la necesidad de enterrar a los muertos que se pudieron y al llegar con el patrón, de vuelta a la finca le tuvo que decir el Administrador que había perdido varios de sus hombres, con esto tuvo suficiente para mandarlo a hablar con el en su despacho, el Administrador iba de un coraje y tanta humillación...