La Fiesta Maravillosa Del Jardín (Cuento)

La fiesta maravillosa del jardín

Una buena mañana de Abril, se vistió de fiesta la madre naturaleza. Todas las flores se vistieron con sus mejores aromas y sus mejores colores, las grandes galas cantaron melodías del alma que retumbaban en el cielo que hasta los ángeles bailaron. Las aves sintonizaron distintas canciones angelicales, confundiéndose con diversas inspiraciones como la delos versos lirico, coplas, sabaletas, contrapunteos.

Las aves emprendían el vuelo trinando alegres melodías, las mariposas volaban presumiendo sus múltiples colores, orgullosas y erguidas con gran exactitud, viajaban hacia la luz incandescente con un sonido celestial que despertaba hasta el más profundo sueño, pero de manera encantadora y así se incorporaban a la majestuosa fiesta,derrochando belleza y glamur.

Esparciendo allí un nuevo amanecer cuando las margaritas lanzaron su aroma que envolvió todo el ambiente, los turpiales sonrieron mostrando su amarillo o naranja bien resaltado, los colibrí con su cola amplia y redondeada de plumaje verde muy brillante aletearon más fuertes sus hermosas alas, los tucanes lanzaron su grito con su pico muy desarrollado y de vivoscolores muy llamativos por su brillantez y colorido que hacían pensar en los colores del arcoíris.

El cardenalito de color gris, de pecho y de abdomen blanco su cabeza y garganta son de un rojo vivo, algunos ejemplares de color amarillo con su plumaje suave como la nieve dieron lindos giros alrededor del entorno cual majestad, el azulejo dejo sus montañas y deslumbro con su azul zafirojunto al canario entonaron una canción que parecía saludar a todos a sus pasos y cien aves salieron volando.

Las gardenias resplandeciendo de luz, perfumando con un intenso y agradable aroma todo a su alrededor, engrandeciendo el símbolo de la gracia femenina, la sutileza y del mérito artístico, ella quizá la más bella y deliciosa entre las plantas, que rodeaban un hoyo con agua rosadaque burbujeaba como los fuegos artificiales en el cielo salieron para unirse a la gran celebración.

Las rosas parecían unas lindas niñas, de  dulce  sonrisa y tierna mirada, tenía unos pétalos muy grandes que brillaban siempre de alegría, de color rojo, anaranjado, salmón, blancas, rosadas y pie verde se fascinaron y cada una de ellas en sus diferentes tonalidades dieron su mejor brillocon el rocío de la mañana.

Los coquitos insectos vistosos tradicionalmente con simpatía e incluso se las considerado como signo de buena suerte no podían faltar en esta gran celebración. Los saltamontes que invitaron fueron aquellos que hacen ruidos audibles usualmente al frotar las patas contras las alas ya que eran los que seguían el compas de la música celestial, los grillos seguían asus hermanos los saltamontes al ritmo salteador.

Los ojos de las ranitas parecían aún más saltones que de costumbre, todo las maravillaba, todo le parecía lindo, a pesar de ser desconocido para ellas. Miraban las cosas con los ojos del corazón, de un corazón bueno, sencillo. Comenzaron a saltar chochas de la vida dispuestas a recorrer cada rincón de la fiesta y hacerse nuevos amigos.Ciempiés Tenía unas patitas ágiles como las plumas, su gran afición era bailar, aunque sus saltos eran más torpe que los de su hermano. Le encantaba subirse encima de las flores y empezar a taconear.

Los gusanitos entre sesenta o más crecieron con tanta belleza, cuando se dieron cuenta ¡Eso sí que fue una sorpresa! En cuanto estuvieron fuera comprobaron que ¡ya no eran unos gusanitos!Sus cuerpos tenían dos preciosas alas de color azul aterciopelado, una a cada lado de su cuerpo con unos dibujos blancos y negros preciosos.

Ellos no habían visto nunca una cosa tan bonita y cuando comprobaron que al mover las alas podía elevarse, sintieron tanta alegría que comenzaron a bailotear por el aire posándose de flor en flor. Y entonces se dieron cuenta de que ya no necesitaba...