La franja























La historia de Franja Morada

Por el Dr. Héctor Eugenio Arteaga (“Gogo”)

No puedo negar la satisfacción que me produce escribir este artículo porque fundamentalmente implica evocar la etapa que tal vez todos los que tuvimos oportunidad de pasar por la universidad recordamos con más cariño en nuestras vidas.
Es allí donde la militancia políticaalcanza el grado máximo de entregas sin especulación. Conservo muchos amigos de distintas corrientes políticas que, coherentemente han mantenido con honestidad sus principios. Este es un patrimonio muy preciado.
Hoy, más que nunca, me siento identificado con la juventud argentina y, por supuesto, con la universitaria. Estos jóvenes fueron los que tal vez con más crudeza sufrieron la dictadura, elhorror de la guerra y debieron soportar el proyecto del “proceso” de “embrutecer para gobernar”.
Sin alejarme del tema no resisto la tentación de aportar una reflexión cual es que el elemento gravitante del movimiento estudiantil de todas las épocas es la movilización para obtener sus conquistas.
En 1918, Hipólito Irigoyen le hizo saber en las antesalas de la Casa de Gobierno a Enrique Barros,firmante del Manifiesto Liminar de la Reforma que “debían producirse hechos” que justificaran la intervención del gobierno nacional en el conflicto universitario cordobés.
Como consecuencia de esto, el 9 de septiembre en 1918, los famosos “83” toman la universidad y ello dio lugar, posteriormente, a la llegada de la intervención del ministro José S. Salinas, que atendió los justos reclamosestudiantiles.
Los estudiantes de hoy deberán rescatar la universidad del oscurantismo, cuentan con un gran aliado en el gobierno de la Nación, pero deberán allanarle el camino. Esta es la constante de los estudiantes del ayer, de hoy y, seguramente, de los mañanas.
Y al decir de ese gran reformista que fue el Prof. Carlos S. Bianchi (La Plata) “no hay democracia política allí donde se sofoca alindividuo afiliándolo al partido único; no hay democracia económica allí donde existen millones de sumergidos; no existe democracia cultural allí donde se cierra o se limita el acceso a la enseñanza”.
Pan, paz y libertad. Tierra para los desposeídos; escuela para quienes no sepan leer. Planes de educación adecuados para quienes quieran estudiar. Campo abierto para cada hombre en la medida de susnecesidades y al alcance de sus necesidades. Que nadie sienta miedo del vecino, ni del gobernante, ni del maestro, ni siquiera de las asechanzas del tiempo.
He aquí la vigencia de la Reforma Universitaria que tantos discuten o niegan. El reclamo diario, cada vez más amenazante, de los pueblos, nos afirma en defensa de tal causa. Nada puede ser más intenso que desoír tales voces. Y, esta es nuestratarea, tarea de reformistas:
Señalar a todos los demócratas, gritar a todos los gobiernos nuestra decidida vocación humanista. Y preparar a los jóvenes de hoy para la reivindicación y la afirmación del derecho al trabajo, a la amistad entre los pueblos y a la supresión de todas las vergüenzas de esta civilización”.
La experiencia, que brinca la historia del movimiento estudiantil ayudará a nocometer errores del pasado, que atenten contra el principio fundamental cual es el de preservar la democracia.
Repitiendo la enseñanza de Enrique Bergson: “Conservar la disposición del espíritu con que entramos a la universidad y estando siempre dispuestos cualquiera sea la edad y la circunstancia de la vida a volver a ser estudiantes”, haré prácticamente un relato cronológico del nacimiento de FranjaMorada.

Los primeros pasos
La historia de la Unión Nacional Reformista “Franja Morada” tiene su origen en el esfuerzo de las agrupaciones reformistas de todo el país para unificar sus luchas contra el régimen instaurado el 28 de junio de 1966, y rescatar la conducción de los organismos naturales de los estudiantes de manos sectarias que impedían su remozamiento.
Al Partido Reformista de...