“La gente piensa que aquí en caquetá vivimos así, en guerra”

Nathalia Salamanca Sarmiento
Especialización en Teoría y Experiencias en Resolución de Conflictos Armados
Área: Economía Política de la Guerra II
Universidad de los Andes
Diciembre, 2008

“La gente piensa que aquí en Caquetá vivimos así, en guerra”
Colombia ha vivido un conflicto armado prolongado que se ha ensañado con los campos y los municipios alejados del centro del país, de lacapital administrativa. Ante la ausencia de Estado y de fuerzas del orden oficiales, en esas regiones se configuraron grupos armados guerrilleros y paramilitares, que adquirieron fuerza mientras cooptaban esferas sociales, políticas, económicas y culturales. Esto sucedía en las regiones mientras en el centro se seguía hablando de una democracia inmutable y justa. Su violencia, justificada por unos como“la vanguardia del pueblo” y por otros como “la defensa ante esa vanguardia”, encontró el combustible necesario en la ilegalidad del tráfico de drogas y en las sólidas e incuestionables relaciones “patronales” que permitían la creación de redes sociales en las que vivir “pagando” o “debiendo” favores era visto como normal y tradicional.
Revisar las relaciones que los grupos armados ilegaleshan construido en el país a través de los ojos de los niños es una manera de acercarse a la temática. Lo es, sobre todo, si se tiene en cuenta que la población infantil en el país ha sido la principal víctima de la violencia: reclutados por grupos armados, desplazados junto a sus familias o huérfanos, sin opción de educación o acceso a servicios de salud… Las violaciones a sus derechos se acumulany son tantas, que con la reciente Ley de Infancia y Adolescencia se estableció, de una vez y para siempre, que los derechos de la infancia prevalecen sobre los derechos de todos los demás (para lo que esto pueda servir).
En un país históricamente dividido entre el centro y la periferia, que presta atención a unas voces mientras ignora otras, las narraciones de los niños proveen, a veces sinquerer, un contexto que evidencia lo que han aprendido en compañía de sus familias, en las escuelas y lo que han visto mientras viven una Colombia en guerra –así el término quiera ser borrado de los diccionarios–.

Los miedos del centro y la periferia
La revista Cromos publicó hace un par de años un artículo titulado Por qué los niños tienen miedo. Esta publicación semanal, que se redacta enBogotá, aseguraba, desde el sumario del texto, que los niños colombianos soñaban con la guerrilla y “algunos saben más nombres de guerrilleros que de futbolistas de la selección Colombia”.
Todo el documento es una explicación de cómo el prolongado conflicto armado que ha sufrido el país ha afectado a los niños: sueñan con secuestros, guerrilleros que entran a sus casas y matan a sus padres(los identifican porque “tienen vestidos verdes con cuadritos”), pandillas que los persiguen e, incluso, dejaron de jugar a policías y ladrones para ser guerrilleros contra paramilitares. Una niña de ocho años citada por la publicación llega a asegurar que le da miedo que “mi mami se ponga a llorar porque yo esté secuestrada”, y un niño de su misma edad dijo no querer encontrarse con el Mono Jojoy,a quien describe como el “dirigidor” del frente 40 de las FARC. Algunos niños entrevistados aseguraron querer irse a Estados Unidos huyéndole a la guerra.
El artículo, de tres páginas, después de presentar tal panorama, concluye que no todos los niños están “tan afectados”, que algunos, en últimas, solo viven la guerra por televisión y que hay que prestarle mayor atención a la infancia quese encuentra en zonas en donde el conflicto armado es más intenso y, finalmente, directo.
Ahora bien, la fotopelícula de tres minutos titulada Miedos, realizada en Belén de los Andaquíes, busca resolver la misma pregunta. El tema, investigado por Luis Alfredo y Yeison Capera Perdomo, fue publicado en el blog http://escuelaaudiovisualinfantil.blogspot.com y en el popular sitio de videos en...