La iglesia católica en querétaro durante la revolución

“Santa María de Guadalupe, esperanza nuestra, salva nuestra patria” oraban los queretanos católicos en 1910. Un grupo mayoritario que abarcaba prácticamente la totalidad de la poblacióndel estado en aquel año, y que mediante peregrinaciones y oraciones pretendían poner fin a la violencia suscitada por el movimiento, escribe Ramón del Llano Ibáñez.
Según lasEstadísticas Sociales del Porfiriato 1877-1910, publicadas por la Secretaria de Economía en 1956, el número total de habitantes en el estado de Querétaro al año de 1910 era de 244 mil 663personas, de las cuales profesaban la religión católica 244 mil 508 en este sentido la iglesia gozaba de un gran poder para influenciar a la sociedad.
¿Cuál fue el papel o la posición que lareligión católica tomó durante el movimiento armado? Ramón del Llano en su publicación El partido Católico y el primer Gobernador de la Revolución en Querétaro: Carlos M. Loyola,manifiesta que “las actividades de la iglesia católica fueron dirigidas a detener la revolución” es decir, la ideología tomada por la institución era la de respetar a las autoridades y seguircon el modelo y la forma de gobierno que se tenía en la época.
El orden social para la iglesia, tenía bases sólidas en la sumisión y la obediencia hacia el gobierno. La cabeza delcatolicismo en el estado, Manuel Rivera Muñoz, Obispo de la diócesis de Querétaro en aquellos años, aseguraba que “al pueblo se le acalla, se le contiene y se le contenta no con discursosocialista sino con pan y hojas de catecismo”.
La resonancia que tuvo el repudio a la violencia propagado por la iglesia católica en Querétaro se refleja en la pasividad de lapoblación ante el movimiento. Ramón del Llano asegura que a raíz de esta campaña “los habitantes dieron la espalda a los personajes que incitaban a un cambio por vía de las armas”.