LA IGUANA

 La iguana: liderazgo en 3D
Maneja exitosamente las tres dimensiones: profundidades marinas, anchurosas y sinuosas superficies terrestres y las alturas y verticalidad de las palmeras o los laberínticos árboles viejos.
Se crece con las caídas. Maneja las alturas sin contratiempos. Se recrea posándose en donde nadie puede hacerlo. Se muestra grande ante los ataques.

Por Jorge EliecerCastellanos M. jorgecast06@yahoo.com

El caporo o garrobo , Iguana macho, se mueve prodigiosamente en todos los campos, sin importar su estructura dureza o firmeza; sus desplazamientos abarcan superficies lizas, sinuosas e inestables en las cuales se balancea prodigiosamente con lentitud asombrosa y con estabilidad significativa. Si se cae de un árbol, se levanta erguido, inmediatamente.Estudia detenidamente todos sus pequeños y grandes movimientos de avanzada larga o corta. Se desplaza hacia arriba con destreza sin igual entre las ramas y el tallo liso de una palmera, por entre los arboles de trupillos o los palos de tamarindo o dividivi, sin ser visto por nadie pues está naturalmente predispuesto y de forma perfecta esta camuflado tanto para realizar multimovimientos ascendentes,descendentes, hacia arriba, hacia abajo y además horizontales u oblicuos, ya sean largos o medianamente cortos.
Su cuerpo desaparece por espacios de tiempo prolongados porque toma su relax en un ramaje del color exacto al de su cuerpo. Y su cola, como complemento, parece un gajo seco de un final de rama. Así nadie puede descubrir, con facilidad alguna sus procesos operacionales ni de pensamiento.Se agarra con poder y fuerza en toda superficie por agreste que sea y vence a la ley de la gravedad con entusiasmo infinito. Sube y sube con el respeto que impone la altura y con el esmero y la decisión que desafía la verticalidad de los tallos y a la postre se impone con el vigor y destreza de su extraordinaria corporalidad. Nadie ataja sus avances. Sus movimientos son controlados y esperanzadorespues construyen centímetro a centímetro la victoria. Sabe que más arriba están los frutos suaves que le están esperando y va paso tras paso por ellos. Jamás improvisa. Cuando logra el cometido los engulle e hincha la papada ubicada debajo de la barbilla para expresar la mejor manifestación de la autosuficiencia y soberanía que otorga la victoria conseguida centímetro tras centímetro, sudada gotatras gota y, por supuesto, lograda progresivamente, en un duro ascenso paulatino de nivel tras nivel de altura.
También infla su papada, -que va desde la parte inferior de su cabeza hasta su cola y es más vistosa que en las hembras-, para defender su harem y para desafiar enemigos en sus dominios. Es una forma excepcional de demostrar su grandeza y la connotación de la alegría del objetivoalcanzado y del dominio adquirido. Si se desliza subiendo, se agarra con fortaleza del ramaje seco o verde, se tranquiliza, no entra en pánico nunca. Se posiciona, entonces, con todos los sentidos, observa serenamente la altura y de nuevo, con mayor ímpetu, continua su proceso indetenible de posicionamiento en las alturas. Aprovecha momentos de descanso en el duro ascenso para solazarse y celebrar cadaetapa conseguida, y para tomar los rayos del sol con los cuales consigue la tibieza en su cabeza y en la espalda superior porque es de sangre fría -ectotermia-, y, claro está, pretende de tal manera calentarse y dosificar sus fuerzas.
Sabe hacer la pausa, en la búsqueda de condiciones más propicias. Se queda inmóvil, casi inane por espacios prolongados, para ahorrar energías y luego emplearlasa todo pulmón en la posterior lucha contra la adversa verticalidad. Parece dormir tranquila y dulcemente aprovechando la frescura del ambiente y de los aires que circundan las partes altas donde se acomoda placenteramente. Cuando llega a las ramas superiores se posa suavemente y desde los troncos atisba el paisaje porque reconoce distancias, calcula alturas, obtiene metas, logra resultados y...