La Incorporación De La Mujer Al Mundo Laboral, Chile
Desde la antigüedad y producto de la “especialización de tareas por roles genéricos” se ha encasillado al hombre y la mujer bajo ciertas características que, prácticamente, determinan la utilidad quecada uno tiene para la sociedad. Históricamente a la mujer se le han otorgado tareas relacionadas con la crianza de los niños, labores hogareñas (coser, cocinar, limpiar, entre otras) o tareas livianas; por el contrario al hombre se le han asignado trabajos en los cuales se implica mayor uso de la fuerza con fines de protección de su entorno y resolución de conflictos que involucraban un mayordesarrollo de la inteligencia. La sociedad en su proceso de evolución, se mantuvo a la par evolutiva de los roles de género y sus tareas, pero manteniendo un papel delimitado en el desarrollo de las actividades ejercidas por mujeres. Otro factor incidente en esta estigmatización, es que el hombre al desenvolverse “libremente” (obviando esferas económicas), ha sido el determinante e impulsor depolíticas que orientan a la mujer a espacios ligados a la familia y la aísla de la toma de decisiones tanto a nivel nuclear, local, o nacional.
La educación, como medio para lograr el aprendizaje y por ende el “desarrollo integral” ha sido atenuada, o primeramente inexistente para la mujer en las sociedades. Desde sus inicios, la formación educativa era exclusiva para los varones, y a medida que lossiglos iban transcurriendo la integración de mujeres al proyecto educativo seguía orientándose hacia una formación para desempeñarse mejor como “dueña de casa”, debido a que su labor fuera del hogar era mal vista por la sociedad, concepción arraigada por la cultura de aquella época, una cultura conservadora y dogmática.
La inserción de la mujer al sistema educativo formal chileno fue posteriora la independencia del país. En 1860 con la promulgación de la “Ley de instrucción primaria” (ley que durmió en el congreso aproximadamente veinte años, lo cual demuestra el poco interés de parte de la clase política por hacer partícipe a la mujer en la educación), se logra integrar la figura femenina en la preparación formal, pero manteniendo el sesgo negativo respecto del rol que puede cumpliry por tanto de la enseñanza que debe recibir. Alrededor de veinte años después la mujer puede hacer ingreso a la vida universitaria tras la aprobación del “Decreto Amunátegui” en 1877, pero se les instó a seguir carreras "femeninas", como se calificó a aquellas profesiones marcadas por una vocación asistencial.
El lenguaje ha marcado profundamente la elección de ciertas carreras profesionales através de la historia, esto lo podemos corroborar basándonos en la hipótesis de Sapir-Whorf, que plantea la existencia de cierta relación entre la gramática lingüística y el entendimiento del mundo. Según esta hipótesis podemos reconocer que se asume una existencia de capacidades y roles diferentes entre los géneros. En la práctica lo podemos notar en palabras como: enfermera, secretaria,...
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