La Inteligencia Emocional

A lo largo de la historia de España, el sistema educativo ha sufrido múltiples reformas
centradas en la mejora de la calidad de la enseñanza, abogando desde la ley de la LOGSE (1990)
hasta la actual ley de la LOE (2006) por una enseñanza integral del alumnado, una enseñanza que
no solo se centre en contenidos “académicos”, sino que eduque todas las dimensiones del
alumnado:dimensión intelectual, artística, afectiva-emocional, social, moral, física, entre otras. Así
lo contempla la LOE (2006) en unos de sus principios: “la orientación educativa y profesional de
los estudiantes, como medio necesario para el logro de una formación personalizada, que propicie
una educación integral [el subrayado es nuestro] en conocimientos, destrezas y valores”.

La LOE (2006)contempla por primera vez el término de competencias básicas,
definiéndolas como:

Aquellas competencias que debe haber desarrollado un joven o una joven al finalizar la enseñanza

obligatoria para poder lograr su realización personal, ejercer la ciudadanía activa, incorporarse a la

vida adulta de manera satisfactoria y ser capaz de desarrollar unaprendizaje permanente a lo largo de

la vida (p.1).


Las ocho competencias básicas, establecidas en consenso con el marco propuesto por la
Unión Europea, que deben estar presentes en el currículo son (Ver imagen 2. Competencias
básicas).





















Imagen 2. Competencias básicas


Destacando la competencia social y ciudadana, la LOE(2006) destaca entre las
habilidades de esta competencia algunas de las recogidas en el ámbito de la educación emocional
(ver gráfico 5. habilidades de la competencia social y ciudadana).



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Proyecto de inteligencia emocional. “EMPATÍZATE”
Conocerse y valorarse, saber comunicarse en distintos contextos, expresar las propias ideas y

escuchar las ajenas, ser capaz de ponerse en ellugar del otro y comprender su punto de vista

aunque sea diferente del propio, y tomar decisiones en los distintos niveles de la vida

comunitaria, valorando conjuntamente los intereses individuales y los del grupo. Igualmente

la práctica del diálogo y de la negociación para llegar a acuerdos como forma de resolver los

conflictos, tanto en el ámbito personal como en el social (p.7).Sin embargo, aunque en el currículum escolar se contemplan objetivos que recogen
contenidos tanto conceptuales, como procedimentales y actitudinales, para lograr el desarrollo
integral del alumnado a través del desarrollo de las ocho competencias, debido a las altas cifras de
fracaso y abandono escolar y un arraigamiento a la enseñanza tradicional, entre otrascuestiones, en
múltiples centros educativos se sigue priorizando la enseñanza de contenidos “académicos”
relegando a un segundo lugar otro tipo de contenidos por considerarlos de menor importancia.

Tal como afirman Barrera,
Donolo, Acosta y González (2012), a
pesar de que exista un modelo de
educación que focaliza sus recursos en el
desarrollo del aprendizaje cognitivo,las
personas no solo operan a través de la
“inteligencia racional”, sino que poseen
también una inteligencia emocional que
desarrollan a través de las experiencias
vividas. Esta debería ser tenida en cuenta
en el currículum escolar ya que las
habilidades que la comprenden también
pueden ser aprendidas.


Gráfico 6: habilidades de la competencia social y ciudadana

Es portanto que consideramos de creciente importancia llevar a cabo el desarrollo de un
programa de inteligencia emocional para trabajar los aspectos que contempla el alcance de la
competencia social y ciudadana y que deberían estar recogidos en el currículum ordinario.

4.5.2. CONCEPTO DE INTELIGENCIA EMOCIONAL

Según Gallardo y Gallardo (2010), el término de inteligencia emocional (IE) fue...