LA INTELIGENCIA
La inteligencia es considerada la interacción constantemente activa entre las
habilidades heredadas y la experiencia ambiental, que da como resultado la
capacidad de adquirir, recordar y utilizar conocimientos, de entender tanto los
conceptos concretos como los abstra, de entender la relación entre objetos, hechos e ideas y de aplicar y utilizar todo lo mencionado como una poderosa forma de
resolver los problemas.
La teoría de los factores, de Spearman, sobre la inteligencia sostiene la existencia
de un factor general (g) y varios factores específicos (factores s) en la inteligencia.
También se identificó, gracias a Thurstone, 7 factores relativamente diferentes. El
modelo de la estructura del intelecto de Guilford, incluye 170 factores como resultado de una interacción de operaciones, contenidos y productos. Horn y Cattell
propusieron que existen dos tipos de inteligencia: la “fluida” y la “cristalizada”. El
enfoque del procesamiento de la información, de Sternberg estudia los pasos que
las personas utilizan para procesar la información necesaria para resolver los
problemas de las pruebas de inteligencia. Los psicólogos actuales creen que tanto la herencia como el ambiente influyen en la
inteligencia, aunque existe un desacuerdo considerable sobre la proporción en que
interviene cada uno de estos factores. No existe ninguna diferencia entre los sexos
del CI global. Sin embargo, las mujeres suelen sobresalir en la habilidad verbal y los
hombres en la espacial. Posiblemente por razones de estas diferencias entre los sexos son debidas las diferencias en el cerebro y en experiencias de socialización
de los dos sexos.
Al pensar las personas utilizan símbolos en lugar de objetos, sucesos e ideas para
poder manipular conceptos e imágenes. Una de las preocupaciones mayores de la
psicología cognitiva es el estudio de los procesos del pensamiento humano, que incluye el lenguaje, la formación de conceptos, la resolución de problemas y la
creatividad. El lenguaje es un medio de comunicación, generalmente a través de
sonidos hablados que expresan un significado específico y están organizados según
unas reglas. Cada lenguaje posee una gramática, un conjunto de reglas para
organizar las palabras en oraciones. El fonema es la unidad mínima del sonido, el morfema es la unidad mínima del habla con sentido. La semántica es el estudio del
significado del lenguaje. La sintaxis es el conjunto de reglas para organizar las
palabras en frases. El habla pre lingüísticas ocurre en una secuencia
estrechamente relacionada con la edad cronológica, en ésta se incluye el llanto, el
balbuceo y la imitación de sonidos. Los teóricos del aprendizaje social acentúan el papel de la observación, la imitación y el refuerzo. Aunque las teorías del
aprendizaje explican por qué los niños aprenden un lenguaje determinado, no
pueden explicar la aparición de expresiones nuevas y originales. Los nativistas
creen que los seres humanos tienen una capacidad innata para el lenguaje.
Chomsky llama a esta capacidad innata “mecanismo de adquisición del lenguaje (MAL)”. Actualmente los psicólogos creen que el lenguaje se desarrolla a través de
una interacción activa entre el niño y la persona que lo cuida. El bebé tiene cierta
capacidad para adquirir el lenguaje como también para distinguir las variaciones en
los sonidos, para responder a la voz de su madre y para moverse al compás del
habla de un adulto. Esta capacidad permite que el niño se beneficie del tipo especializado del habla conocido como el lenguaje maternal.
Un aspecto importante del pensamiento humano es la capacidad para organizar
diferentes estímulos en conceptos, categorías de objetos, sucesos o personas. Esta
capacidad nos permite poner un orden en un mundo lleno de sucesos y objetos
aislados. Un concepto bien definido es aquel que se puede especificar por un ...
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