la isla
Un día habrá una isla
que no sea silencio amordazado.
Que me entierren en ella,
donde mi libertad dé sus rumores
a todos los que pisen susorillas.
Solo no estoy. Están conmigo siempre
horizontes y manos de esperanza,
aquellos que no cesan
de mirarse la cara en sus heridas,
aquellos que no pierden
el corazón y el rumbo en lastormentas,
los que lloran de rabia
y se tragan el tiempo en carne viva.
Y cuando mis palabras se liberen
del combate en que muero y en que vivo,
la alegría del mar le pido a todos
cuantos partan su panen esta isla
que no sea silencio amordazado.
[Contextualización del poema: A qué obra pertenece el poema; quién es su autor y
cómo era su tiempo] Pedro García Cabrera (Vallehermoso, La Gomera,1905-Santa Cruz de
Tenerife, 1981) es, sin lugar a dudas, una de las figuras literarias canarias de mayor proyección.
Su vida y su obra vienen conformadas por dos constantes: su claro compromisosocial y su
especial atención hacia el paisaje isleño. En su trayectoria poética hay dos grandes fases: por un
lado, durante la primera mitad del siglo XX, García Cabrera parte del modernismo paraculminar con la estética vanguardista (surrealista) y con influencias de los poetas de la
generación del 27 (sobre todo Lorca y Alberti); por otra parte, a partir de la guerra civil y
especialmentedurante la larga posguerra, escribe sobre temáticas intimistas y sociales con una
clara militancia política de izquierdas. En el primer período colabora con revistas insulares
(entre ellas destacanCartones y Gaceta de Arte, junto a escritores como Agustín Espinosa,
Emeterio Gutiérrez Albelo, Domingo López Torres, Domingo Pérez Minik o Juan Ismael),
publica dos poemarios antes de la guerra,Líquenes (1928) y Transparencias fugadas (1934), y
escribe varios libros a partir del 36 bajo el efecto devastador de la derrota de la II República y el
triunfo del fascismo. Tras ser encarcelado y...
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