La Juventud

Toro-Alfonso, J. (2008). Cuando la juventud nos sorprende: Perspectivas de desarrollo y familia sobre la juventud homosexual, lesbiana y bisexual. En R. Nina (Ed.), Acercamientos multidisciplinarios a la adolescencia en el Caribe (pp.46-65). San Juan, PR: Publicaciones Gaviota.

Cuando la juventud nos sorprende: Perspectivas de desarrollo y familia sobre la juventud homosexual, lesbiana ybisexual1

Josι Toro-Alfonso Departamento de Psicologνa Facultad de Ciencias Sociales Universidad de Puerto Rico

1 Presentado en el Primer Seminario Adolescencia en el Caribe, 9-10 de mayo de 2003. Facultad de Ciencias Sociales, Recinto de Rνo Piedras, Universidad de Puerto Rico

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La orientaciσn sexual ha sido uno de los fenσmenos mαs estudiados en la ϊltima dιcada, y posiblemente elfenσmeno menos comprendido por nuestra sociedad. La historia de la humanidad estα plagada de eventos de incomprensiσn, rechazo, violencia y marginaciσn. Desde las mαs antiguas interpretaciones de los eventos de Sodoma y Gomorra, la Santa Inquisiciσn de la Iglesia Romana, la quema de las brujas, el divαn del psicoanαlisis, las terapias electroconvulsivas y de aversiσn hasta los cσdigos modernos desodomνa, la sociedad ha mantenido intacto de una forma u otra, su temor y rechazo a la diferencia en la orientaciσn sexual (Fone, 2000; Murray, 2000). Todos los homosexuales, lesbianas, bisexuales y transgιneros hemos sentido la presiσn de la diferencia en algϊn momento de sus vidas. Todas las personas adultas con una orientaciσn diferente a la mayorνa, conocen en carne propia el escarnio y el temor queacompaρa la seria decisiσn de vivir la vida a plenitud. La historia del siglo pasado contiene el desarrollo de los grandes esfuerzos que la comunidad homosexual y lιsbica han desarrollado para enfrentar la marginaciσn y el prejuicio (Ardila, 1998). Sin embargo, ningϊn grupo estα mαs vulnerable que el grupo adolescente y la juventud que se reconoce como homosexual, lesbiana, bisexual o transgenιrica(Owens, 1998). Es importante seρalar que la adolescencia y la juventud no son grupos homogιneos. Una cosa es la juventud urbana, otra la juventud rural. No es lo mismo la juventud centroamericana, que la juventud estadounidense o puertorriqueρa. Desde luego no es lo mismo ser adolescente homosexual en el Village de Nueva York o la Calle Castro de San Francisco, que ser gay - y que el mundo losepa - en algϊn pueblo del interior de

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nuestra isla. Y sobre todo, la adolescencia y la juventud no estαn exentas de las influencias de las clases sociales, el racismo y el heterosexismo rampantes en nuestra sociedad. En Puerto Rico existe poca o ninguna investigaciσn sobre el impacto de la orientaciσn sexual en la adolescencia y la juventud. Despuιs de todo, el silencio es posiblemente unode los golpes mαs brutales que aprende la juventud sobre el significado de su orientaciσn sexual. En general, la homosexualidad, el lesbianismo y los asuntos de las comunidades de transgιneros han sido poco estudiadas en Puerto Rico a pesar de que en los ϊltimos aρos ha habido mαs espacio social para hacerlo. No se ha hecho probablemente por que el peso de la epidemia del SIDA nos ha llevado apriorizar en aspectos de salud. Sin embargo, es a travιs de los programas de salud en la comunidad gay que se ha recopilado mucha informaciσn clνnica y anecdσtica sobre este particular. Despuιs de todo, la salud es uno de las necesidades fundamentales de las personas. El silencio de las personas profesionales les convierte en cσmplices ante la mofa y la risa frente a jσvenes homosexuales (AmericanPsychological Association, 2001; Owens, 1998). La investigaciσn nos indica que las maestras y maestros generalmente no hacen nada cuando un grupo de estudiantes se mofa, rechaza, ataca verbalmente y hasta fνsicamente a un joven homosexual en las escuelas. De hecho, en los Estados Unidos se ha estado discutiendo ampliamente la responsabilidad de la gerencia escolar en proveer un ambiente seguro a...