La lengua absuelta

La lengua absuelta
Por: Marta Ruiz.
Publicado el: 2012-02-15

Alguna vez, cuando era vicepresidente, el ahora controvertido periodista Francisco Santos dijo que el país no estaba preparado paraconocer la verdad de su pasado inmediato. El miedo de muchos es que la verdad se convierta en un motivo de retaliación, de venganza, en leña para la hoguera de los conflictos que siguen al rojo vivo ylos que parecen ya estar bajando de intensidad. Temen también muchos que los hechos de ayer se juzguen desde el contexto actual. Con los valores de hoy. Con la mirada crítica a un pasado tanimperfecto como el nuestro.
No obstante las advertencias de quienes veían en la verdad un arma de doble filo, el país optó por dos caminos para llegar a ella: el judicial y el de la memoria. Lo punitivo y losimbólico.
El camino de la verdad judicial ha sido largo y no siempre certero. Los expedientes de la infamia que reposan en los tribunales de justicia y paz se han construido desde la voz de losvictimarios. Se han esclarecido crímenes, se han encontrado cuerpos, se han destapado redes y complicidades. Pero ha sido un desafío separar el oro de la escoria. La verdad de la mentira. La confesión dela retaliación. El acto de contrición del oportunismo. Las “verdades” de los jefes paramilitares con frecuencia llegan tarde, y cronometradas con coyunturas políticas. Y lo más significativo siguensiendo sus silencios, sus encubrimientos frente a los que la justicia se muestra pasiva. Esta es por naturaleza una verdad llena de sombras.
Al otro lado, está el esfuerzo por la memoria. Loscasos emblemáticos que ha investigado el Grupo de Memoria Histórica y que han puesto en primer plano las versiones de las víctimas. Masacres como la de Segovia, violencia sistemática como la de Trujillo,o escenarios de guerra como Bojayá. Estos documentos hasta ahora son esfuerzos académicos de unir los fragmentos de las vidas suspendidas de los sobrevivientes. Un ejercicio de reconstrucción y...