La Lengua Secreta De Los Incas

Una teoría sobre la lengua secreta de los Incas
Rafael Gómez Díaz

A la hora de establecer una teoría, los historiadores peruanos deben tirarse de los pelos ante el cúmulo de contradicciones a los que se enfrentan permanentemente, originados, en primer lugar, por los profesionales de los que dependen (arqueólogos, antropólogos –o etnólogos- y lingüistas esencialmente) y, en segundo lugar porlos errores básicos de los cronistas españoles, de los que beben todos (excepto los arqueólogos), por no existir documentación escrita previa a la española, o haber sido destruida por éstos (caso de los quipus).
Las causas del primer problema son, básicamente, algo tan enraizado en Perú como el sentimiento de pertenencia a un territorio, que hace “barrer” para la costa o la sierra, o para el norteo el sur, según se tercie, a veces con omisiones importantes o manifestaciones arriesgadas. Por otra parte, también ha sido excesivamente visible, a veces, la alineación de ciertos profesionales con políticas oficialistas o antioficialistas de cada momento, que han contribuido más a la desorientación.
Las del segundo problema obedecen, a su vez, a un doble problema: por un lado la ingenuidaddel conquistador recién llegado que pregunta inocentemente a los lugareños y que recibe respuestas lógicas, para éstos, que son traducidas en una lógica radicalmente distinta: es el caso de dar por buena la simplista respuesta indígena “quechua” (pongamos “vivo en Cataluña”), sin intuir que tras la respuesta podía ocultarse “vivo en Cataluña, soy vasco y hablo castellano”, confundiendo territoriocon etnia y con lengua. Por otro lado, nada inocente, tener que administrar un territorio con objetivos precisos de uniformidad y control (nada diferente a lo que hicieron los incas) y decidir “por decreto” que esto es aimara o que esto es quechua, porque me da la gana, sirve a mis propósitos y así debe ser.
Es una constante la confusión de etnias con lenguas y de ambas con territorios o tipos dehábitat, que la mayoría de las veces obedece al hábito indígena de definirse como perteneciente al territorio en que habitaba, sin reparar en su propia etnia o lengua.
Sirvan estas bases para orientar mis propias conclusiones, advirtiendo de entrada que lo que he calificado como teoría personal no pasa de ser una deducción o sistematización propia, tras “hilvanar” todas las teorías ajenas queconozco y optar por una línea concreta. Para tratar de resumir lo más posible, mi limitaré a exponer las teorías con las que coincido, obviando las otras existentes.
Una advertencia previa: a veces se nos olvidan las cronologías, que lo alteran todo: en este caso no debemos olvidar que el origen de los Incas (reinado del mítico Manco Cápac) está fechado alrededor del 1200 d.c., lo cual aclara muchastonterías.
La línea que sigo me induce a creer que los futuros Incas salieron de Taipicala tras un desastre que prácticamente aniquiló esta cultura (la llamada cultura Tiahuanaco). La mayoría de autores sostiene que ese desastre fue una conquista aimara, considerando a los aimaras una etnia (cosa con la que no concuerdo) y no la lengua de un grupo de etnias diferentes (cosa con la que coincido).Otros autores piensan que el desastre fue climático, natural, propio de otras muchas situaciones de culturas peruanas. Yo asumo la tesis del desastre climático, por la sencilla razón de que ante una conquista no se tiene tiempo de nada, y los Taipicala enterraron concienzudamente la ciudad y sus tesoros, en una “desaparición” premeditada, exacta a la ocurrida en Caral y en Nepeña, entre otras.Pasara lo que pasara, da lo mismo para nuestra teoría. Si los aymaras fueron los conquistadores es obvio que los conquistados no hablaban aymara.
Está probado que la nobleza de Taipicala, sacerdotes adivinos y curanderos, denominados capacas (palabra de origen Taipicala (puquina) y no Inca, que dio origen al término Cápac (quechua: jefe; poderoso), se dispersó a raíz del desastre. La gran...