La Leyenda Del Chan
De todos los manantiales existentes, había uno particularmente generoso: abundante en sus aguas, cálidas, cristalinas y generador de cualquier tipo de vida, desde donde se lemirara parecía un espejo donde se reflejaba el celestial color del firmamento de Apaseo El Alto. Nuestros antepasados celebraban en sus márgenes los rituales del sacrificio humano y las ofrendas a susdioses.
A la llegada de los españoles, las aguas de ese manantial les fueron arrebatadas a los naturales de la zona y conducidas a las haciendas colindantes. No contentos con haber usurpado aquelnacimiento, construyeron en 1892 una profunda acequia para captar el agua que emanaba de otros pequeños nacimientos y aguajes. A ese canal construido de manera artificial se le conoció desde entoncescomo "El Tajo".
Urgidos de abastecerse de agua para beber, bañar y asear la ropa, los habitantes de la zona tenían que recurrir al lugar para satisfacer todas sus necesidades; los ociosos comenzaron adesforestar las zonas aledañas, a contaminar el agua, a saquear los Cués instalados sobre el Cerro de San Isidro y a explorar una milenaria cueva por donde salía el agua a la superficie. Fue entoncescuando se inició la leyenda.
Los eternos aventureros, no conformes con explorar la profundidad de las aguas comenzaron a indagar en el interior de la caverna; con un falso valor, se auxiliaban deantorchas humeantes y sobre el fondo del subterráneo río se fueron depositando objetos ajenos a la vida acuática. Las luces y los ruidos en el interior de la cueva fueron provocando la metamorfosis y laira de las distintas especies que ahí habitaban; una y otra ocasión veían perturbada su tranquilidad y la impotencia por impedirlo se fue transformando en odio.
Pero un día de tantos, algunos de esosaventureros se internaron en la cueva y misteriosamente desaparecieron: quienes se habían rezagado únicamente habían escuchado el grito reprimido de alguien que había intentado pedir auxilio; llenos...
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