La Libertad Contractual y Autonomia de la Voluntad


La Autonomía de la Voluntad

Se entiende por autonomía privada el poder de determinación de la persona. Entonces podría definirse aquel poder complejo que tiene la persona para el ejercicio de sus facultades, sea dentro del ámbito de libertad que le pertenece como sujeto de derechos, sea para crear reglas de conducta para si y en relación con los demás, con la consiguiente responsabilidad encuanto actuación en vida social.
Podríamos agregar además que, la autonomía consiste en un poder, en una potencia o potencialidad, creadora del individuo, reconocida por el ordenamiento jurídico. Poder o potencia para regular por si, sus propios intereses en sus relaciones como con los demás. La ley, el ordenamiento reconoce a la voluntad esa facultad o poder de establecer regulaciones concarácter vinculante y normativo, es decir, que la voluntad del hombre tiene esa aptitud, esa facultad, esa potencia para poder crear relaciones jurídicas con carácter vinculante, con carácter obligatorio como si fuera una ley.
Se pueden distinguir dos enfoques: a) El poder atribuido a la voluntad referido al uso, goce y disposición de poderes, facultades y derechos subjetivos y b) el poder referido ala creación modificación y extinción de relaciones jurídicas. El primer aspecto concreta lo que es la autonomía de ámbito de ejercicio de los derechos subjetivos, en tanto que el segundo tiene un sentido restringido en el ámbito jurídico.
La posibilidad de que dos o más personas queden obligadas por su propia iniciativa significa el reconocimiento del poder creador de la autonomía de la voluntad.En realidad, solo en tanto el ordenamiento jurídico contenga dicho reconocimiento es que puede hablarse de Derecho Privado en contraposición al Derecho Publico.
Es importante mencionar el negocio jurídico es la manifestación mas saliente de la denominada autonomía privada o autonomía de la voluntad, en el sentido de que, mediante el mismo la voluntad del individuo vale, en el ámbito delordenamiento jurídico, para modificar situaciones preexistentes, ejercitando así una función constitutiva.
Dicho lo anterior, entonces, cabe vislumbrar al contrato como un negocio jurídico en el cual se pone en manifiesto la posibilidad de creación de normas a partir de la voluntad de los particulares.

Crisis de la Autonomía de la Voluntad y Contrato

El principio de la autonomía de la voluntad semenciona ya formalmente en el siglo XVI, debiendo agregarse que es posteriormente acogido por la ideología liberal como una de sus ideas fundamentales y valores supremos.
Para Kant: “Una persona no puede estar sometida mas que a las leyes que se da a así misma. Toda obligación que no tenga su fuente en la persona seria contraria a la dignidad del hombre”.
Sin embargo, pese a la fuerza con quesurge el dogma, con los años se llega a constatar que no es posible conceptualizarla como una libertad absoluta de hacer o no hacer, de prometer y obligarse, de marcar un circulo de libertad o de contienda entre los individuos sin que en forma alguna intervenga el Estado.
También es inexacto decir que se trata de algo que, como cosas suyas, solo a los interesados importa, por lo que se le ha denegar toda justificación a las normas imperativas que la limiten.
Un aspecto importante en mencionar, es que, dentro de la teoría individualista la fuerza obligatoria del contrato procede del señorío de la voluntad; el hombre es libre para contratar o no, para encadenarse o no; pero si contrata deja de ser libre, es el “el hombre encadenado”. Existe libertad para entrar en la convención pero nopara salir de ella.
Surgen entonces las criticas en cuanto a que “la doctrina de la autonomía de la voluntad sobreestima la voluntad humana, colocándola por encima del legislador, el que queda cohibido a reglamentarla”.
La crisis de la autonomía de la voluntad surge en realidad con el intervencionismo estatal. Es por ello que se concluye que, el principio de la autonomía de la voluntad no puede...