La Libertad

LA LIBERTAD

Introducción
A la hora de decidirme por el tema de la libertad como objeto del presente trabajo me he basado fundamentalmente en dos razones. La primera, porque lo considero un tema apasionante desde el punto de vista filosófico, por sus múltiples implicaciones tanto morales como existenciales. Y por otra parte, por tratarse de una cuestión que en la actualidad se encuentraplenamente vigente, como confirman las palabras con las que Luc Ferry y Jean-Didier Vincent empiezan el capítulo II “Determinismo y libertad en la filosofía contemporánea: la ética evolucionista y sus críticas” incluido en su libro ¿Qué es el hombre?: “A veces se considera que el debate sobre la libertad pertenece únicamente al siglo XVIII y que acaba con él. La verdad es más bien la contraria: no hahace más que comenzar en el siglo XVIII y desde entonces no ha cesado de resurgir bajo diferentes formas” (1).
No obstante, debido al todavía básico nivel de formación de la que escribe estas líneas, he estimado prudente no implicarme en aspectos valorativos, sino que más bien enfocaré el trabajo en la realización de una selección -y por consiguiente sin ánimo de exhaustividad- de lasprincipales reseñas, tanto en su dimensión histórica como actual, acerca del tema de la libertad. Y por último, finalizaré con una conclusión personal en la que trataré de exponer algunos de los aspectos más relevantes que me sugirieron las diferentes lecturas relacionadas con la libertad.
En cuanto a la elección del título, he buscado uno que sintetice en cierta manera lo que ocurre con la libertad,cuya consideración por los filósofos oscila entre dos posturas

(1) Ferry, Luc y J.D. Vincent, ¿Qué es el hombre?, Taurus, Madrid, 2001, p. 75.
extremas y radicalmente opuestas como pueden ser el fatalismo y el libertarismo, pero que el sentido común nos hace percibir que su sitio se debe encontrar en algún lugar bastante alejado de ambos extremos.

El fatalismo
Es una doctrina que consideraque todo lo que ocurre es inevitable porque está sujeto a una fuerza superior que rige el mundo, negando por lo tanto que exista el libre albedrío. La postura típicamente fatalista surge en la época del helenismo con el estoicismo, corriente filosófica creada por el mercader fenicio Zenón de Citio (335-264 a.C.), y cuyas enseñanzas fueron extendidas y sistematizadas principalmente por Crisipo, quedirigió la escuela estoica desde el 235 hasta el 208 a. C. Los estoicos defendían la idea de que todo lo que ocurre está previamente determinado por la divinidad, pero pensaban sin embargo que todo estaba dispuesto para alcanzar el bien del conjunto y, por consiguiente, cualquier mal individual al final redundaría en beneficio para la generalidad. Como no podemos oponernos al destino, la libertadconsistirá en la aceptación de nuestro destino y, de esta forma, el ejercicio de nuestra voluntad se hallará en armonía con la ley universal que no podemos eludir.
Para el fatalismo todo lo que ocurre está determinado por el mundo exterior al ser humano, y no importa cuales sean sus deseos o lo que haga porque lo que tenga que ocurrir ocurrirá de cualquier modo. Por lo tanto, niega que exista ellibre albedrío y considera que los deseos y conductas humanas quedan fuera de la cadena de sucesos del universo. Con la llegada del cristianismo y la incorporación de un Dios libre y personal conocedor del futuro se encontró base para rechazar el fatalismo. Así, adquiere gran importancia el principio de la libertad moral del ser humano, y como consecuencia de ello la responsabilidad derivada desus acciones. De esta manera el fatalismo pagano deja paso a la idea de la divina providencia cobrando gran importancia la idea de libertad y la responsabilidad humana al elegir entre el bien y el mal.
Por su parte, Tugendhat cataloga el fatalismo como un malentendido que se produce, cuyo resultado es llegar a la conclusión de que “puesto que está todo determinado, no tengo que deliberar o no...