La Lombriz Y El Sorsal
Estaba una lombriz solazándose entre el pasto húmedo; se hundía en la tierra, hacía túneles alegremente y volvía a salir para enterrarse rápido, porque el sol ¡Vaya sícalentaba! De pronto chocó con lo que parecía una piedra; se trataba de una baldosa que el hombre había puesto allí.
La curiosidad pudo más que la prudencia, se subió a la loseta y sintió el calorquemante; quiso huir y refugiarse entre la hierba fresca, pero el dolor la hizo perder su orientación y el vientre entró aún más en el ardiente cemento. Sufría tanto que se revolcaba y azotaba, buscandosalir de ese infierno.
Sobre un árbol próximo había dos zorzales que contemplaban la escena. Uno de ellos dijo al otro:
—Compadre, te apuesto que soy más rápido que tú y me como a eseestúpido gusano.
—Mmmm, ¿Crees que tiene mucho mérito engullir una comida tan fácil y, claro, bastante caliente —mirando con ojos de compasión al rastrero animalejo— ¡Pobre, trataré de ayudarlo! —Parece que se te soltó un tornillo —amoscado refutó el otro—. Pero, entonces ¿qué haremos?
El zorzal compasivo gritó a la lombriz:
—¡Eh, amigo! ¿Te puedo rescatar de allí? Mira que tequemas.
—Por favor ¡Sáqueme de este lío! —suplicó a su enemigo natural.
Abrió sus alas ante la sorpresa de su compañero, que no atinó a moverse, cogiendo con su pico al gusano se lo tragó. —Pero...,¿qué hiciste, compadre? Si ibas a ayudar a la pobre lombriz que sufría tanto ¿por qué te la comiste?
—Difícil explicar, compadre —puso cara de filósofo—. Sufría tanto la desdichadaque no tuve corazón verla así. ¿Acaso no está mejor en mi estómago saciando mi hambre que sufriendo en esa candente loseta?
—Y, por último —continuó filosofando el zorzal—, nunca había comido unalombriz asada —chasqueó la lengua—. ¡Sabrosa que estaba!
EL CUENTO DE LA LECHERA Y SUS LOMBRICES
Erase una vez una lechera que tenía una vaca. Cada día ésta le producía 10 Kgr de...
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