La Nueva Política de Viviendas Sociales Chilena

Chile se encuentra en un momento decisivo en su política de viviendas sociales, donde la calidad está cobrando más importancia que la cantidad. Pero, ¿qué quiere decir calidad? ¿Es sólo una cuestión de estándares de construcción y del tamaño de la vivienda, o es un desafío más complejo? Desde 1990, los proyectos de viviendas sociales han puesto un techo sobre las cabezas de casi dos millones defamilias chilenas, afrontando una escasez de viviendas que fue identificada en ese entonces como uno de los problemas sociales más urgentes del país. En el presente, esa “urgencia” se encuentra en el pasado, pero en el apuro por reducir el déficit, muchas de esas “casas” resultaron ser pequeñísimas, mal construidas y ubicadas muy lejos de las oportunidades de trabajo y educación. Inicialmente, lacoalición de gobierno de centro-izquierda que ha estado al mando desde 1990 le ofreció a las familias pobres una combinación de subsidios habitacionales y préstamos con bajos intereses. Sin embargo, aquellos sin un ingreso estable tenían dificultad para obtener crédito y, cuando lo hacían, las casas eran, a menudo, de muy mala calidad, lo que los llevaba a no pagar sus préstamos. En el 2001, elgobierno cambió de táctica y creó el Fondo Solidario de Vivienda (FSV). Esto eliminó las hipotecas de intereses bajos y duplicó los subsidios a unos US$10.000 por familia, lo que permitió que los recursos fuesen canalizados hacia tierras y construcción más que hacia el pago de malos préstamos. Sin embargo, las críticas respecto a la calidad de las viviendas de los chilenos pobres se han acumulado enlos últimos años. Como resultado, durante su campaña presidencial el año pasado, la Presidenta Michelle Bachelet se comprometió a convertir las viviendas sociales en una prioridad y, el 18 de Julio, anunció una ambiciosa nueva política. Esto busca reducir drásticamente el déficit habitacional que todavía sufre el quintil más pobre de la población, aumentar el tamaño de las casas, su calidad, ypromover la integración social de quienes las habitan. Bajo la nueva política, el Ministerio de Vivienda y Urbanismo (MINVU) dará un total de 223.000 subsidios durante el período de cuatro años del gobierno a través del Fondo Solidario de Vivienda y el Programa de Subsidio Rural. Para garantizar la calidad de las casas nuevas, el gobierno aumentará los subsidios habitacionales de los chilenos pobrespor sobre un 15% a un promedio de unos US$11.700. La nueva política también incluye 174.000 subsidios para familias de clase media. “En el presente, la situación económica de Chile nos permite poner más recursos en el Ministerio de Vivienda, y es un gran aumento en nuestro presupuesto”, dice María de la Luz Nieto, consejera de la Ministra de Vivienda Patricia Poblete. El gasto público total ensubsidios habitacionales ha crecido bruscamente desde 1990, alcanzando sobre US$500 millones al año y, aunque el ministerio no quiso entregar cifras respecto a los costos de las nuevas medidas, estimaciones privadas sugieren que ahora, el gasto podría subir en un 50% más. La Ministra Poblete también destacó la importancia de la participación del sector privado en las viviendas sociales. “El apoyo deterceras partes es esencial porque, a través de fundaciones, empresas, municipalidades y ONGs, casi duplican el subsidio del estado,” señaló. El tamaño sí importa Bajo la nueva política, las viviendas tendrán por lo menos dos habitaciones que podrían ampliarse en 4, lo que significa un área de piso de 40m2 que posteriormente puede ser duplicada a 80m2 . Esto es una mejora substancial a lasituación de años anteriores, cuando las viviendas eran de sólo 28m2 y en algunas ocasiones, incluso menos. El furor en los medios de comunicación sobre familias enteras que vivían en las llamadas casas enanas con un superficie de sólo 12m2 en la comunidad de Malloa, VI Región, no hace mucho sacó el problema de las viviendas sociales hacia la luz del debate público. De hecho, las “casas” estaban...