La patria en su dilema

Publicado en el blog Futuro y Libertad





Termina el mes de febrero mas agitado en muchos años; la confusión y la desinformación reinan cual feliz pareja recién casada en los hogares, en los trabajos, en las aulas de clase y en las calles de toda Venezuela. La verdad es que nadie tiene la certeza de cómo terminara esta situación; pero si hay algo de lo cual estoy seguro es que latensión vivida en esta tierra pone de manifiesto lo que he estudiado y analizado desde hace algún tiempo: que el venezolano eligió transitar por una vía equivocada, sin saberlo, pues se le privo del derecho a elegir entre el camino a la servidumbre y el otro camino, el que conduce al progreso y el desarrollo; que la ruta de salida no es hacia adelante (no es solamente “salir a la calle” para “sacara Maduro”, como te proponen los mencheviques –socialdemócratas tipo Capriles o Leopoldo López- , es “erradicar el sistema” del que ellos mismos se han beneficiado tanto y la consecuente desestatización del país) sino hacia atrás, buscando en el pasado (el siglo XX) los elementos que hicieron de este país una Tierra de Gracia en el concierto de las naciones y aplicarlos a nuestra actualidad.¡Me explico! El camino a la servidumbre (nombre del libro del economista austriaco Friedrich A. Hayek) y el consecuente triunfo del comunismo no comenzó con el triunfo de la Revolución Cubana, ni termino con la subida al poder de Hugo Chávez (como te han hecho creer a ti y a mi); comenzó mucho antes, cuando un grupo de jóvenes estudiantes influidos por las tesis marxistas se alzaron contrala dictadura del “tirano liberal” Juan Vicente Gómez (lo de tirano es de Manuel Caballero, no me crean a mi); en esos años, la nación gozaba de los beneficios de una economía no intervenida por el Estado y que aplicaba en su legislación alguno que otro criterio mas o menos liberal, por supuesto, que la educación era –y es- publica, gratuita y obligatoria y por ende, se explican los inconcebiblesniveles de analfabetismo, pero eso no fue requisito para que el país transitara por un camino al progreso que se mantuvo con ligeras modificaciones por casi tres cuartos de siglo.



Pero todo eso termino cuando murió el general Gómez y otro militar andino, Eleazar López Contreras se hizo con el poder; algunos de esos jóvenes que le hicieron la vida difícil al difunto general eran ahoradirigentes políticos de “altura”, Rómulo Betancourt fundaba el Partido Democrático Venezolano –legalizado en 1941, bajo el nombre de Acción Democrática- y mucho tiempo atrás, se había constituido el Partido Comunista de Venezuela. Eran los tiempos de la Gran Depresión en Estados Unidos y el también general López Contreras inicio la centralización de la política económica y monetaria de la nación,creando el Banco Central de Venezuela; ni hablar del sucesor del nativo de Queniquea –me refiero al general Isaías Medina Angarita- que busco la industrialización del país desde el Estado, promulgo una Ley de Hidrocarburos vigente hasta 1976 y se le ocurrió inventar la “cedula de identidad” (para los ingenieros sociales somos simplemente un numero, acuérdate de eso). Pero no conto con que losjóvenes militares y AD le iban a derrocar cuando le faltaba poquito para terminar su mandato.



Tres años de Junta Revolucionaria de Gobierno cívico-militar –que no es lo mismo que unión cívico-militar, un invento nazi-fascista- le dieron paso a la nefasta y efímera presidencia de Rómulo Gallegos, genio de las letras pero pésimo en el manejo de un país, que solo trajo inestabilidad política ysolo logro que los militares –los que en 1945 derrocaron a Medina- lo tumbaran, que su partido fuera declarado ilegal por el nuevo régimen y que los principales cabezas, desde Rómulo Betancourt para abajo marcharan al exilio.



El nacionalismo (colectivismo de derechas para el profesor Alberto Mansueti) de Marcos Pérez Jiménez fue el último amanecer para el país, que tuvo tres años...