la piedra en bruto
Aquí como me ves, no fui siempre lo que soy; vengo de los picachos, de las alturas; donde podía ver el Sol antes que nadie y de cuando tu vivíasen la penumbra, yo aún podía disfrutar de sus suaves destellos. Yo aspiraba el aire puro y fresco, y cuando el huracán rugía a ti te causaba espanto: Yo simplemente reía y mi mole enhiesta, firme y segura recortaba con mi perfil perfecto el infinito azul del horizonte. En temporadas las transformaciones atmosféricas depositaban en mí sus copos blancos que me hacían parecer más pura y blanca y alcoronar mis sienes me sentía orgullosa de recibir la ofrenda del espacio.
Después las hacia resbalar por mí pendiente transformada en cascada clara y cristalina, donde el Sol adornaba su luz Arcoiris. A mi altura solo los Cóndores llegaban y era agradable ver a mis plantas como; Arrodilladas ante mi grandeza, la inmensa esmeralda del valle bordada de lentejuelas de mil colores. Los ríos, losanimales, las flores no hacían más que poner un marco elegante a mi belleza.
Mí orgullo llegó a tal extremo a cegarme que me creí invencible, inaccesible, eterna. Pero cuán equivocada estaba, un día el universo como queriendo demostrar mi error, desató sobre mí sus furias y mandó sobre el rayo que con su luz cegó mis ojos y al terrible impacto volé en mil pedazos.
Me precipité en abismo y amedida que rodaba más pequeña me hacia, y rodando y rodando fui descendiendo hasta quedar al fondo del barranco.
Lloré de rabia al verme en la infinita impotencia, cuando los elementos deformaron más y más en mí, otra época de orgullosa elegancia. Así permanecí no sé cuánto tiempo hasta que al igual que otras piedras compañeras mías de infortunio nos transportaron.
Y volvió a renacer en mí laesperanza, pensé que quizás me pondrían en el lugar que por mí alcurnia me pertenecía. " Seré ahora un monumento " - Pensaba - Con mi concurso simbolizaré la justicia y en las manos de un artífice con mí cuerpo formaré el corazón duro e inflexible de la razón; o quizás la venda que representa la imparcialidad de todos sus juicios.
Tal vez formaré parte del monumento a la Patria y eternizaré conmi presencia las glorias de un pueblo. Me gustaría ser la corona de Laureles que ciña la sien del patriota o quizás, porqué no, seré parte integrante del monumento a la madre para que las generaciones venideras vean, que con mi cooperación, se inmortalice el amor más puro y más grande que existe . . . Con que cariño acogería la idea de ser el brazo de la madre que envuelve al niño en eternacaricia . . . O los ojos que con dulzura al tierno retoño mira, o las lágrimas que las madres a raudales vierten ante las ingratitudes de los malos hijos . . . Eso habría querido ser, después de ser grande, seguir siéndolo ya que no en tamaño si en espíritu, en esencia.
Cuántas y cuántas ilusiones me hice, cuántos deseos de altura y grandeza, en cambio aquí me tienes, tan dura y fea como en elbarranco, tan grotesca que causo pena y si no me escupen es porque ni de eso tengo forma. ¿ No habrá algún artífice que me transforme y me dé vida? . . . Sólo he servido para representarte, para que veas en mí tus imperfecciones, tus vicios, y tu ignorancia, soy ahora ejemplo del mal. Y sin embargo, a veces me avergüenzo que me comparen con alguno de ustedes.
Poco tienes de verme, yo en cambio he...
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