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El Consejo de Defensa Suramericano, ¿Una política de seguridad cooperativa? Análisis en perspectiva con el caso europeo de seguridad, OSCE.

Teniendo en cuenta las anteriores referencias realizadas respecto al contexto regional en el cual nace el Consejo de Defensa Suramericano, su estatuto y sus planes de acción, se intentará responder al interrogante que versa sobre el CDS y sus alcances,¿Es el CDS una política de seguridad cooperativa? La hipótesis del presente trabajo es que el Consejo de Defensa Suramericano si bien se halla inscripto en el marco de un proceso de seguridad, no ha culminado en un espacio estrictamente cooperativo; aún no ha alcanzado la etapa en la cual las medidas de confianza denotan mecanismos estrictamente cooperativos. Por otro lado, se considera necesarioaclarar que aquí se sostiene que el CDS tampoco es ni intenta ser una alianza militar bajo la lógica de seguridad colectiva.

En diciembre de 2008, impulsado por la iniciativa de Brasil, se creó dentro del marco de UNASUR, el Consejo de Defensa Suramericano. Se estableció que operaría como un órgano de consulta, cooperación y coordinación sobre temáticas de defensa; y asimismo, se enunciaron lostres objetivos generales que buscaría dicha institución: consolidar Suramérica como una región de paz, impulsar el desarrollo de una identidad regional en temas de defensa y construir consensos en la región para fomentar la cooperación en dicha materia. Si bien formalmente se ha declarado por parte de los Estados Miembros de UNASUR que el objetivo es estrechar los lazos cooperativos en materia dedefensa, y adoptar medidas que fomenten la colaboración, la confianza y la transparencia; aún queda un largo camino para alcanzar dichas metas. Al retomar el análisis anteriormente realizado sobre las acciones y las medidas adoptadas en el seno del Consejo de Defensa Suramericano, y al contraponerlo con los objetivos señalados, podría sostenerse que existe una importante brecha entre lo realizado ylas aspiraciones declaradas en el estatuto de la institución.
A fin de profundizar en lo anteriormente afirmado, se utilizará el argumento de Fontana (1996) sobre las medidas de confianza. Según dicho autor, estas últimas impulsan e integran procesos de seguridad que analíticamente pueden dividirse en tres etapas: mientras las medidas de primera generación tienen un alcance limitado, sonmayormente bilaterales y preferentemente simbólicas; las de segunda generación, presentan mayores niveles de obligatoriedad y poseen mecanismos de verificación; las de tercera generación son medidas estrictamente de seguridad cooperativa que comprenden y amplían a las dos anteriores (Fontana, 1996:8-9).
Si se toma en consideración esta división analítica del proceso de seguridad (Fontana, 1996), podríadecirse que las medidas de confianza adoptadas en el seno del Consejo de Defensa Suramericano no llegan a enmarcarse en la tercera etapa de medidas específicamente de seguridad cooperativa. Si bien los planes de acción elaborados desde el año 2009 comprendieron la adopción de ciertas medidas de confianza1 de carácter no obligatorio, la mayor parte del accionar del CDS todavía versa en torno aldictado de conferencias y seminarios relacionados a sus cuatro ejes de acción, y a la conformación de grupos de trabajos con miras a la elaboración de propuestas sobre temáticas específicos. En este sentido, el examen de los planes de acción del CDS revela que si bien se realizaron avances en torno a la cooperación multilateral en materia de defensa en la región, también demuestra que en torno a loscuatro ejes de acción del CDS2 los mayores avances se dieron en torno a dicha conformación de grupos de trabajo que facilitan el diálogo y la búsqueda de consenso entre delegados de los países integrantes. Asimismo, es importante resaltar que las decisiones que emanan del CDS no son vinculantes sino declaratorias, por lo tanto, las medidas y actividades ejecutadas desde la institución no son...