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Pedro llevaba un año viviendo con su novia Belén y podía decirse que era feliz, al margen de los familiares y demás dificultades cotidianas. Al menos hasta que conoció a Verónica, una chica que tomó café en la misma cafetería que él y con la que coincidió el 21 de diciembre. Ella le pidió que le alcanzara las servilletas y él se las acercó. Un acto normal y cotidianocon el que ambos regalaron su mejor sonrisa. Sin embargo para Pedro, Verónica le dijo mucho más con su sonrisa. Entendió que estaba sola, que no estaba bien y que necesitaba un amigo y un apoyo.
Con el corazón abierto, Pedro le dijo con naturalidad si se encontraba bien y ella sonrió con cierta tristeza respondiendo que no. Que en su trabajo le exigían demasiado y muchas de las cosas que lepedían no sabía hacerlas y se burlaban de ella, el jefe amenazaba con despedirla si no espabilaba y vivía sola porque su novio la acababa de dejar por su mejor amiga de modo que no podía perder su trabajo.
Pedro sintió que debía ayudarla y sin dudarlo le ofreció comer juntos ese mismo día para que contara más sus problemas por si él la podía ayudar. Ella aceptó y su sonrisa demostró que le hacíailusión. Verónica era muy bonita, delgadita y de estatura algo pequeña, su pelo era castaño oscuro y liso y sus ojos azules. Su mirada despedía inocencia y tristeza al mismo tiempo. Desde luego que se sintió atraído por ella pero en ningún momento pensó en engañar a su novia. Su intención era buena y con idea de animarla y, ¿por qué no?, hacerse amigos, quedó a las dos en el mismo restaurante para comerjuntos. Incluso cuando habló con Belén por teléfono le dijo lo que había pasado y que se sentía en la necesidad de ayudar a esa chica. Belén le contestó que tenía un enorme corazón y que por eso le amaba tanto. Él respondió que también la amaba.
La hora de comer llegó con mucha lentitud. Pedro se pasó toda la mañana pensando en Verónica, en sus preciosos ojos y lo mucho que deseaba quellegara la hora de la comida para poder hablar con ella y animarla. Eso le causó varios aprietos en su trabajo porque no consiguió terminar nada de lo que había empezado y se llevó la bronca de su jefe. Cuando al fin la aguja de las horas aterrizó en las dos, se disculpó ante sus amigos con los que solía comer y salió corriendo del edificio, dispuesto a encontrarse con ella. Su corazón latía muy fuertey cuando vio a Veronica esperarle en la barra tomando un refresco se sintió diez años más joven y como si estuviera en su primera cita.
- Hola - la saludó.
- Hola - dijo ella con timidez.
- ¿He tardado mucho? Lo siento.
- No importa yo estoy desde antes de la hora.
La mirada de ella era tierna y esperanzada. Pedro vio en sus ojos que él le gustaba pero no le dio importancia a ese detalledado que a él también le gustaba ella y no significaba nada. Era una comida de amigos.
- De modo que hoy tienes un mal día - quiso restarle importancia a sus problemas.
- No es hoy, es todo el mes. Parece que he tenido mala suerte en todo - dijo ella.
- Las cosas buenas siempre se alternan con las malas. Después de una mala racha siempre viene una buena – dijo él, sintiéndose algo pedante. - Seguro que sí. Hoy te he conocido dijo ella
- Oh, claro. Hoy empezó bien, ¿verdad?
- Mi novio jamás me escuchaba.
- ¿Por qué estabas con él entonces?
- Era guapo, era muy cortés,...
- Ah, ya, un guapeton... ¿Cuándo aprenderéis las mujeres a no confiar en una cara bonita?
- No era solo eso. También parecíamos entendernos. Sin embargo se entendió mejor con mi mejor amiga.
Pedroasintió con la cabeza pero puso cara de circunstancias. ¿Cómo se consuela a alguien a quién han engañado? Sobre todo cuando él tenía la punzada de culpa porque creía estar traicionando a Belén. Aunque seguía siendo una simple comida amistosa.
- Tú me has escuchado sin conocerme de nada, eres un encanto - dijo ella sonriendo.
Pedro sintió que el estómago le burbujeaba, sin duda esa chica...
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