La pulsión





- “Mirame, mirame, mirame, mirame….” El joven lee un libro mientras viaja en colectivo y de pronto, desde su asiento, descubre la belleza de una pasajera que viaja parada pocos metros delante de él. Con los ojos clavados en ella, repite mentalmente “Mirame”, poniendo a jugar esa condición loca y típica de lo humano: que por querer (mucho) algo, eso se produzca. Lo quiere tanto que yacasi lo musita. Invoca a la bella pasajera para que tome nota de él. Para que lo incluya en su campo visual. Para que lo mire y note que la mira…. Y lo logra.
La bella joven de pronto gira su cabeza y tropieza con la mirada del joven. Mirada que le es tan dirigida que no le provoca indiferencia, sino que la concierne.
Por un brevísimo instante, las miradas se cruzan. Se inquieren mutuamente.De inmediato el joven saca sus ojos de la pasajera y mira el paisaje por la ventanilla.
Apenas soporta la mirada de ella, la mirada de su mirada, la mirada que lo sorprende mirando.
Un instante después, fastidiado consigo mismo por su “huida”, vuelve los ojos hacia la joven que ya no lo mira. Y relanza su invocación: “Mirame de nuevo, mirame de nuevo, mirame de nuevo…”

Con ese breverecorte una compañía telefónica promocionaba años atrás algún producto y remataba el spot con el slogan: “Comunicate, es fácil”. La duplicidad de ese “fácil” (para abusarnos de la semántica) salta a la vista.
Porque deja insinuada la calidad paradójica del deseo humano y lo que se juega a su alrededor. Y porque al mismo tiempo vincula las vicisitudes de ese deseo con la dimensión del goce. Vía libreal campo de la pulsión. El campo fértil del psicoanálisis.







El espacio obliga al recorte, pero valga la siguiente puntuación:
- interesa poner de relieve la estructura de la pulsión, su incidencia en el fantasma, su montaje y su recorrido en el curso de una cura, o tal y como se nos presenta en la clínica.
- recordamos la afirmación lacaniana respecto de que "la pulsión es eleco en el cuerpo de un decir". Un decir que no será indiferente para el sujeto, que da cuenta de qué modo ha sido deseado, hablado, nombrado el mismo. Decir del Otro, que perfora, delinea, marca y se entromete por todos los agujeros, bordes del cuerpo impactados por la demanda del Otro, que a su vez constituye dicho cuerpo. Podríamos decir que es la madre quien hará de un cuerpo un cuerpolibidinizado, pero es la pulsión la que recorta, con sus recorridos, el mismo.
- el estímulo pulsional no proviene del mundo exterior sino del interior del propio organismo. Y vale distinguir entre un estímulo fuerza que opera de un solo golpe, y una pulsión que actúa como fuerza constante. No hay huída posible contra ella. Al mismo tiempo, la presión constante viene a subrayar una vez más que no hayobjeto que colme, que satisfaga dicho apremio.
- importa recortar a la vez un concepto, el de fijación, del que Freud dice: "Un lazo particularmente íntimo de la pulsión con el objeto". La fijación nos indica que hay un goce del cual el sujeto no puede sustraerse, que se instala, que habita y motoriza, y a su vez depende de la posición fantasmática del sujeto.
- para que el sujeto pueda relanzar suposición deseante y redistribuir su goce será indispensable el recorte y la caída de cada uno de los objetos a los cuales el sujeto se fijó con características particulares.




- en el decurso de la pulsión aparecen las reversiones, “ver-verse- hacerse-ver” que nos permitirán situar una gramática pulsional. Lo novedoso es que con este tercer tiempo queda planteada la aparición de un sujeto,un agente. ¿Es que acaso antes de esta emergencia no había sujeto? Podríamos decir que cuando comanda la pulsión, el deseo del sujeto está aplastado, mientras el deseo del Otro insiste sin límite.
De lo que se trata ahora es de poner a jugar estas ideas en relación a la viñeta propuesta. Y si nos detenemos en este punto es porque algo de lo que el sujeto trae resuena en este párrafo. Un deseo...