La reliencia Invisible

En “La resiliencia invisible”, trata de analizar de forma exhaustiva la adaptación de menores con ciertas problemáticas, en concreto de sordera y con nacionalidad distinta al del país de residencia, en un aula ordinaria. De forma que, durante todo el trabajo de investigación el concepto de resiliencia, y en específico la de carácter invisible, ha tomado gran parte de análisis de Andreu y Manolo,los menores protagonistas del libro.

Tras la lectura de éste, y como actividad universitaria, me encamino a exponer qué ha supuesto o supondrá en mí, como futuro educador social:

LA CEGUERA, para empezar, es importante destacar aquello que las autoras denominan “hechos culturales invisibles”, tan presenten en ámbitos escolares y educativos, que no son percibidos por los técnicos yprofesionales de tales espacios y , ciegan su labor, impidiendo obtener toda la información necesaria para ejercer en nuestro caso como educadores. Por ello, en muchas ocasiones, caemos en el error del llamado fenómeno de transferencia o contratransferencia, al intentar dejar de ver hechos invisibles y acercarnos lo máximo posible a realidades y verdades sobre los colectivos.

INTERDISCIPLINAR, nuestrasinvestigaciones como E.S. pueden y deben apoyar a los maestros en su labor; dar pie a un cambio de mejora a la dinámica de la escuela o el profesor y, a mantener conexiones con el profesorado, investigar juntos y compartir experiencias y conocimientos.
INCLUSIÓN, como modo de dar respuesta a la diversidad, debe estar integrada dentro del aula y las escuelas ordinarias, sin necesidad dediscriminar, y sin justificación alguna. La lectura me ha ayudado a romper el estereotipo social que afirma que la integración de los socialmente reconocidos como “lentos”, ralentizará la dinámica del aula influyendo en todos aquellos que estén presentes, y los casos representados han demostrado todo lo contrario. Además, el desarrollo en “los otros” mejora, así como la socialización, comprendiendo yaceptando las diferencias. El educador, debe ser entonces, un técnico con recursos necesarios, que faciliten la igualdad de acceso y oportunidades, anticipándose o guiando en todo momento.
LOS PADRES, el interés y la motivación por parte de éstos al implicarse activamente en el desarrollo y el aprendizaje de los menores, ayuda y facilita a establecer relaciones entre los educadores, así como posibilitaque tomen el rol de tutor de resiliencia y de apoyo. Pero sus perspectivas pueden agobiar al educador ya que, si preguntan repetitivamente después de cada sesión si ha evolucionado, se trata de una sobreprotección excesiva; no puede esperar que progrese en todas las sesiones, sino a lo largo del tiempo. Este exceso de protección puede llegar a ser negativo, si los padres lo toman como estiloeducativo; según Nardone, Giannotti y Rocchi (2003), puede generar en el menor: rebeldía, falta de sentido de la responsabilidad, inseguridad, ansiedad, etc. Además, los padres pueden exigen y pedir que el niño alcance unos objetivos, que puede hacer que el profesional se centre solo en ellos. Ello, puede hacer que vivamos situaciones como las siguientes:
• Frustración en padres ya que los objetivosplanteados son inalcanzables, y las expectativas no se cumplen. Por tanto, hablamos de la necesidad de atender a los padres, y dependiendo del caso, facilitar recursos y habilidades necesarias (formación)
• Poca profesionalidad respecto al educador al plantear objetivos. Los avances, retroceso o recomendaciones deben llegar a los progenitores tal y como los ve el profesional, sin ocultar niinvisibilizar.
• Si el educador asume un caso, se convierte en una esperanza para los padres. Y ello supone mayor responsabilidad para el educador que debe gestionar.


El PERFIL. El educador social no puede caer en el error de etiquetar y prejuiciar. No etiquetar ni marcar al menor como una acción fija o duradera, el entorno cambia y el tiempo nos hace cambiar. Por ejemplo: ahora, hay más...