La Restauración Delabsolutismo
Páginas: 5 (1159 palabras)
Publicado: 23 de diciembre de 2012
COMENTARIO DE TEXTO
Este, es un texto jurídico, concretamente un decreto.
La restauración de absolutismo.
En diciembre de 1813, tras la retirada militar, Fernando VII y Napoleón firmaron en Valençay el Tratado por el que se suspendían las hostilidades entre España y el Imperio. Derrotado el ejército napoleónico, Fernando VII, hizo su entrada en España enmarzo de 1814. Llega a Valencia el 16 de abril y por aquellos días se publica un Manifiesto de 69 diputados de las Cortes ordinarias (llamado Manifiesto de los persas), en el que se solicitaban al rey la restauración del poder absoluto, la anulación de todo lo aprobado en Cádiz y la convocatoria de unas nuevas Cortes. El monarca, animado por este ambiente, publicaba en Valencia el 4 de mayo estedecreto por el que dejaba sin efecto toda la obra legislativa de las Cortes, a las que acusaba de haberle despojado de su soberanía.
La represión política que siguió a la vuelta de Fernando VII supuso el exilio de unas 15.000 personas en 1814, el encarcelamiento de todo liberal conocido y numerosas ejecuciones.
El retorno de Fernando VII a España el 22 de marzo de 1814,tras firmar con Napoleón el Tratado de Valençay, supuso un giro brusco en la evolución de los acontecimientos políticos.
Fernando, mitificado hasta la saciedad y denominado “el deseado” por unos y otros, recuperó su trono entre muestras de calor popular y prestigio. Era el símbolo de los 6 años de resistencia y encarnaba grandes expectativas de cambio y mejoras tras una década especialmentepenosa. En aquel ambiente de confusión, casi toda España desconocía el servil comportamiento del rey ante Napoleón y lo suponía arrancado de cruel cautiverio. Sin embargo Fernando VII buscó en primer lugar el acercamiento a los círculos más reaccionarios del país. Y los viejos absolutistas, que habían soportado con reservas la aparición y publicación de la obra de Cádiz en espera de tiempos mejores, seaprestaron entonces a hacer retomar la situación a los términos de marzo de 1808.
Fernando VII regresó cautelosamente y no acudió directamente a Madrid donde las Cortes y la Regencia parecían ostentar un poder real sobre la nación. Sus primeros contactos fueron con un grupo de conspiradores que habían redactado un documento, El Manifiesto de los Persas, así llamado por su encabezamiento, en elque solicitaban la reposición del absolutismo. El general Elío, que ostentaba la jefatura del ejército de Levante, le ofreció al rey en Valencia su ayuda para la restitución de la plena soberanía real. Con estos apoyos y mientras en Madrid las Cortes decretaban el establecimiento de Te Deums anuales para celebrar la vuelta del Rey, Fernando dicto este decreto aboliendo todo lo legislado en Cádiz,declarando tanto la Constitución de 1812 como los decretos de las Cortes. Fue un auténtico golpe de estado con el beneplácito de sectores del ejército (Elío en Valencia y Eguía que preparó y efectuó la ocupación de Madrid), así como de parte del clero y de la aristocracia.
El mencionado decreto fue publicado en Madrid el 4 de mayo; los diputados liberales, que esperaban del Rey el juramentode la Constitución, se vieron sorprendidos por una oleada de represión: detenciones y procesos, e incluso no pocos linchamientos, a cargo de grupos dirigidos, en muchos casos por clérigos enfurecidos. Pocos días después de su llegada a Madrid, ordena la detención de un grupo de numerosos diputados liberales, la persecución de los acusados de “infidencia” (afrancesados), y la “purificación” odepuración de funcionarios que hubieran colaborado con el gobierno intruso de José I. se iniciaba así una dura represión que obligó a miles de personas a exiliarse. Con las medidas policiales y políticas se retornó al Antiguo Régimen: fueron suprimida la prensa o las Diputaciones; se restableció la Inquisición y los privilegios feudales; y se reintegraron las propiedades desamortizadas a la Iglesia....
Este, es un texto jurídico, concretamente un decreto.
La restauración de absolutismo.
En diciembre de 1813, tras la retirada militar, Fernando VII y Napoleón firmaron en Valençay el Tratado por el que se suspendían las hostilidades entre España y el Imperio. Derrotado el ejército napoleónico, Fernando VII, hizo su entrada en España enmarzo de 1814. Llega a Valencia el 16 de abril y por aquellos días se publica un Manifiesto de 69 diputados de las Cortes ordinarias (llamado Manifiesto de los persas), en el que se solicitaban al rey la restauración del poder absoluto, la anulación de todo lo aprobado en Cádiz y la convocatoria de unas nuevas Cortes. El monarca, animado por este ambiente, publicaba en Valencia el 4 de mayo estedecreto por el que dejaba sin efecto toda la obra legislativa de las Cortes, a las que acusaba de haberle despojado de su soberanía.
La represión política que siguió a la vuelta de Fernando VII supuso el exilio de unas 15.000 personas en 1814, el encarcelamiento de todo liberal conocido y numerosas ejecuciones.
El retorno de Fernando VII a España el 22 de marzo de 1814,tras firmar con Napoleón el Tratado de Valençay, supuso un giro brusco en la evolución de los acontecimientos políticos.
Fernando, mitificado hasta la saciedad y denominado “el deseado” por unos y otros, recuperó su trono entre muestras de calor popular y prestigio. Era el símbolo de los 6 años de resistencia y encarnaba grandes expectativas de cambio y mejoras tras una década especialmentepenosa. En aquel ambiente de confusión, casi toda España desconocía el servil comportamiento del rey ante Napoleón y lo suponía arrancado de cruel cautiverio. Sin embargo Fernando VII buscó en primer lugar el acercamiento a los círculos más reaccionarios del país. Y los viejos absolutistas, que habían soportado con reservas la aparición y publicación de la obra de Cádiz en espera de tiempos mejores, seaprestaron entonces a hacer retomar la situación a los términos de marzo de 1808.
Fernando VII regresó cautelosamente y no acudió directamente a Madrid donde las Cortes y la Regencia parecían ostentar un poder real sobre la nación. Sus primeros contactos fueron con un grupo de conspiradores que habían redactado un documento, El Manifiesto de los Persas, así llamado por su encabezamiento, en elque solicitaban la reposición del absolutismo. El general Elío, que ostentaba la jefatura del ejército de Levante, le ofreció al rey en Valencia su ayuda para la restitución de la plena soberanía real. Con estos apoyos y mientras en Madrid las Cortes decretaban el establecimiento de Te Deums anuales para celebrar la vuelta del Rey, Fernando dicto este decreto aboliendo todo lo legislado en Cádiz,declarando tanto la Constitución de 1812 como los decretos de las Cortes. Fue un auténtico golpe de estado con el beneplácito de sectores del ejército (Elío en Valencia y Eguía que preparó y efectuó la ocupación de Madrid), así como de parte del clero y de la aristocracia.
El mencionado decreto fue publicado en Madrid el 4 de mayo; los diputados liberales, que esperaban del Rey el juramentode la Constitución, se vieron sorprendidos por una oleada de represión: detenciones y procesos, e incluso no pocos linchamientos, a cargo de grupos dirigidos, en muchos casos por clérigos enfurecidos. Pocos días después de su llegada a Madrid, ordena la detención de un grupo de numerosos diputados liberales, la persecución de los acusados de “infidencia” (afrancesados), y la “purificación” odepuración de funcionarios que hubieran colaborado con el gobierno intruso de José I. se iniciaba así una dura represión que obligó a miles de personas a exiliarse. Con las medidas policiales y políticas se retornó al Antiguo Régimen: fueron suprimida la prensa o las Diputaciones; se restableció la Inquisición y los privilegios feudales; y se reintegraron las propiedades desamortizadas a la Iglesia....
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